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Grupo R, una de las empresas elegidas por el gobierno de la 4T para desarrollar 20 nuevos campos petroleros, considerada una de las contratistas de Petróleos Mexicanos (Pemex) más exitosas, podría acogerse al Capítulo 11 de la Ley de Quiebras de Estados Unidos.
De acuerdo con fuentes cercanas, la decisión de la firma regiomontana que preside Ramiro Garza Cantú parece obedecer a que el Sistema de Administración Tributaria (SAT) la habría intervenido para embargar sus cuentas bancarias, tras haber sido notificado de un “posible procedimiento de rescisión” de seis contratos millonarios con Pemex Exploración y Producción (PEP) por incumplimiento, lo que además arrastraría a 14 empresas con las cuales participa.
En el aire están 832.7 millones de dólares y 287.7 millones de pesos por los contratos 641005815, 641005816, 641009801, 640859800, 645018809 y 421003855 que incumplió, obtenidos en consorcio con firmas como Bosnor, Industrial Perforadora de Campeche, ARG Petroleum Services y Secadero Petrolero de Gas, entre las relevantes.
Lo anterior obligó a Grupo R a acogerse al Capítulo 11, o a vender sus activos, aun cuando recibió un pago de Pemex por 200 millones de dólares, que fue transferido al SAT.
En un oficio firmado por Luz María Zarza Delgado, directora jurídica de Pemex, Grupo R fue notificado de los incumplimientos de contratos.
