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El gobierno federal juega a pensar que los medicamentos que se consiguen fuera del país están bien, pero la solución la tiene “en las narices y no la quiere ver”, afirmó Juan de Villafranca, director de la Asociación Mexicana de Laboratorios Farmacéuticos (Amelaf).
Luego de que en el Diario Oficial de la Federación se publicó un decreto que establece que el gobierno podrá importar medicamentos aún sin contar con registro sanitario emitido por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), opinó que la decisión se tomó sin pensar en las posibles afectaciones y que pone en riesgo a la industria nacional.
“Se van a poder importar medicamentos de India, Malasia, Argentina, países que tienen estándares muy por debajo de lo que se exige en el país. Entiendo el tema del precio y de que lo vean como una solución al abasto de medicamentos, pero se decidió sin tomar en cuenta a la industria y sin existir un piso parejo”, destacó De Villafranca.
Además, lamentó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador le abra las puertas a la industria farmacéutica internacional, sin diálogo con las empresas instaladas en el país.
“No se explica el tema de la bioequivalencia, del empacado de medicamentos. Es claro que buscan soluciones afuera, cuando aquí las tienen. Quisiéramos una reunión, pero en serio, con la Secretaría de Salud, con Cofepris y no salir hasta que haya soluciones, acuerdos, pero sólo te sacan del mercado y no es justo. Parece que quieren tronar a la industria nacional”, resaltó.
Destacó que permitir la importación de medicamentos sin registro sanitario nacional no nada más implica un problema para las empresas que llevan muchos años invirtiendo en el país y que además generan miles de empleos, sino que también se pone en riesgo la salud de los mexicanos.
“Hace muchos años se compró leche de Guatemala porque era más barata, tiempo después se supo que estaba contaminada y sí causó estragos en la sociedad, ese es el problema de creer que lo que se produce en otros países es mejor que lo nacional”, afirmó.
“No es solo la frustración de que nos hagan a un lado, de que desestimen todo el esfuerzo de la industria farmacéutica instalada en México, sino que toman a la ligera los posibles riesgos sanitarios”.
De Villafranca consideró que el acuerdo publicado en el DOF es una decisión tomada a la ligera, que tiene detrás a las autoridades de la Secretaría de Hacienda, sin pensar en la importancia de mantener una regulación estricta. En caso de que algo no funcione, se responsabilizará a la Secretaría de Salud.
“Esta instrucción es de Hacienda, la intención es comprar a mejores precios y uno entiende eso, pero tampoco se han sentado a negociar con laboratorios nacionales, se tomó a la ligera”, alertó.
