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La inflación volvió a repuntar durante julio pasado, impulsada principalmente por el incremento de los precios de frutas y verduras, así como de la gasolina Magna, la cual acumula 12 meses consecutivos al alza, de acuerdo con datos del Inegi.
En el séptimo mes del año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor aumentó 0.54% mensual, la tasa más alta para julio desde 2012. Resultado de lo anterior, inflación anual llegó a 4.81%, cifra superior a 4.65% reportado en junio y la más alta desde marzo pasado.
Por su parte, el índice de precios de la canasta básica tuvo un alza mensual de 0.47%, así como una variación anual de 7.39%, la tasa más alta en lo que va del año.
Entre los bienes y servicios cuyo incremento de precios más incidieron en la inflación durante julio, destaca la gasolina de bajo octanaje, con un incremento mensual de 1.81%, tendencia al alza que viene registrando desde agosto de 2017.
Los aumentos en los precios internacionales del crudo, como el WTI que en el año ha aumentado 13.8%, han permeado en aquellos correspondientes a bienes de consumo, como lo son las gasolinas y gas LP, explicó Alejandro Saldaña, analista de grupo financiero Ve por Más.
El componente de energéticos de la canasta básica ha mostrado aceleración, pasando de una variación anual de 7% en enero de 2018 a 17.63% en la última lectura.
Los precios de bienes agrícolas aumentaron 1.91% en julio, impulsado por un incremento mensual de 6.48% en frutas y verduras. El reporte cita al tomate verde (49.69%), jitomate (10.68%), naranja (19.63%) y cebolla (11.30%) como los productos con alza de doble dígito y con mayor incidencia al alza en agropecuarios.
El índice de precios subyacente, que no incluye bienes y servicios cuyos precios son más volátiles, registró un alza mensual de 0.29% y una tasa anual de 3.63%; el índice de precios no subyacente se incrementó 1.27% mensual y 8.38% anual.
Al interior del índice de precios
subyacente destacó que las mercancías no alimenticias rompieron su tendencia a la baja. Tradicionalmente, este rubro presenta una caída en verano por la temporada de descuentos en comercios.
No se descarta que esto también haya sido resultado por un modesto traspaso de las alzas en el tipo de cambio que se observaron en los meses anteriores, estimó Saldaña.
Al interior del índice subyacente también resaltó un efecto estacional. Los precios de servicios relacionados al turismo, como servicios en paquete (4.59%) y de transporte aéreo (2.53%), tienden a presentar expansiones por el periodo vacacional.
Precios al productor. También se publicó el Índice Nacional de Precios al Productor, el cual pasó de 6.95% a 6.51%; sin embargo, algunas industrias siguen con presiones relevantes (minería no petrolera, construcción y manufacturas de derivados de petróleo y carbón). Esto en línea con el encarecimiento de materias primas (petróleo y metales). Las mercancías y servicios finales destinados al consumo interno (que inciden en la inflación al consumidor), se desaceleraron al pasar de 4.30% a 4.14%.
Los resultados recientes han mostrado un fuerte repunte en los precios de energía, tendencia que puede seguir en los próximos meses, pero hasta ahora no se observa ningún efecto significativo de segundo orden sobre precios de otros productos, advirtió Eduardo González, analista económico de CitiBanamex.
Mayor volatilidad. En la próxima publicación del Índice Nacional de Precios al Consumidor (primera quincena de agosto, el 23 de agosto), el Inegi aplicará el cambio de metodología y año base para el INPC.
Algunos de los cambios más relevantes incluyen: una mayor cobertura geográfica; mayor número de bienes y servicios en el índice; el año base será la segunda quincena de julio de 2018 en vez del actual de la segunda quincena de diciembre de 2010, lo que puede resultar en una mayor volatilidad del índice general.