Para amortiguar el golpe del alza de precios por la guerra en Ucrania, es preferible dar apoyos específicos a grupos vulnerables, permitiendo a los precios ajustarse en función de su comportamiento global, sugirió el Fondo Monetario Internacional (FMI).
Con ello, los gobiernos de América Latina y el Caribe van a poder garantizar la cohesión social y reducir el riesgo de tensión social, establecieron expertos del organismo multilateral.
En un artículo publicado en el blog del FMI, titulado América Latina enfrenta riesgos inusitadamente altos, se señaló que esto ayudará a los grupos vulnerables y contendrá los costos fiscales.
“Para reducir el riesgo de tensión social, los gobiernos deberían proporcionar apoyo focalizado y temporal a los hogares vulnerables y de bajo ingreso, y dejar que los precios internos se ajusten en función de los internacionales”, dijeron los autores Ilan Goldfajn, Jorge Roldós y Santiago Acosta-Ormaechea, director, director adjunto y economista principal del Hemisferio Occidental del FMI, respectivamente.
“Esto ayudaría a grupos vulnerables, contendría costos fiscales, además de incentivar la producción y moderar el consumo”.
En países con redes de protección social desarrolladas se puede extender el acceso para incluir de forma temporal a grupos más amplios de la población, agregó el análisis del fondo.
Este martes, el director general y presidente del consejo de administración de Grupo Bimbo, Daniel Servitje, dijo que la empresa participa en pláticas con el gobierno sobre el acuerdo con el sector privado para medidas que mitiguen el impacto inflacionario en productos de la canasta básica.
Lo anterior, luego de que este lunes el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes, confirmó que hay reuniones con funcionarios en las cuales se buscan opciones para que no se suban los precios de productos clave.
En conferencia con analistas, Servitje dijo que hay preocupación por el pan blanco.
“Están preocupados por 24 productos básicos. Uno que están buscando, tratando de ver cómo se puede afectar de una manera menor a consumidores, es el pan blanco, y esto es algo en que estamos iniciando conversaciones con el gobierno. No sabemos mucho al respecto”, dijo.
En tanto, el presidente de la Confederación Patronal del país (Coparmex), José Medina Mora, aclaró que tanto la institución que preside, como otros organismos empresariales, están en contra de un control de precios.
“En la medida en que haya diálogo, se puede llegar a acuerdos, a que las empresas puedan cada una, dentro de sus posibilidades, y en los productos que afectan la canasta básica, poder disminuir sus utilidades para que no suban tanto los precios”, afirmó.