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La empresa estadounidense Bechtel abandonó el proceso de invitación restringida para participar en los paquetes de procura, ingeniería y construcción de la nueva refinería de Dos Bocas, Tabasco.
De acuerdo con fuentes allegadas al proceso, a escasos 18 días de la presentación de las ofertas que harían las seis empresas invitadas, la compañía estadounidense presentó una carta para excusarse de seguir adelante en la puja.
La carta fue presentada el pasado 1 de julio, confirmaron las fuentes del sector energético consultadas por EL UNIVERSAL.
Bechtel México “pretendía buscar la coordinación del proyecto para no tomar riesgos en la construcción”, lo cual no fue bien visto por las autoridades gubernamentales encargadas de una de las obras de infraestructura insignia de esta administración.
La compañía estadounidense se reunió en septiembre de 2018 con el entonces presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para hablar sobre su experiencia en refinerías e hizo saber que en sus 120 años de existencia ha ayudado a entregar más de 25 mil proyectos en 160 países.
Bechtel había mostrado intereses en participar en tres de los seis paquetes que se ofertaron para el proyecto de la refinería: en el uno, que consistente en la planta combinada y la planta de coquización retardada; en el dos, en las plantas hidrodesulfuradoras de diesel, hidrodesulfuradoras de gasóleo, hidrodesulfuradoras de naftas y la planta reformadora naftas, y el seis, de servicios e integración.
Las fuentes consultadas por esta casa editorial indicaron que, a pesar de la salida de la firma estadounidense, el proceso de contratación se mantiene y el próximo 19 de julio, las otras cinco compañías presentarán sus ofertas.
Cada empresa, agregaron, podrá ganar máximo dos de los seis paquetes ofertados.
Las compañías que continúan en el proceso son: la británica Foster Wheeler, interesada en los paquetes tres, cuatro y seis.
El tres consiste en la planta de desintegración catalítica, la isomerizadora de butanos, isomerizadora de pentanos y hexanos y la planta de alquilación. El paquete cuatro se enfoca en las plantas de aguas amargas no fenólicas y aguas amargas fenólicas, las plantas de regeneradoras de aminas, la planta de tratamiento de gases, la planta de recuperación de azufre y la planta productora de hidrogeno.
El paquete seis es para los servicios e integración, en la cual también estaba interesada Bechtel.
ICA seguirá participando para obtener el paquete uno —en el que estaba Bechtel— y tres. El uno consiste en la planta combinada y la planta de coquización retardada.
La italiana Saipem seguirá pujando por los paquetes dos, cuatro y seis. Estos dos últimos fueron de interés de la empresa estadounidense que se desistió de continuar en el proceso.
La coreana Samsung tiene interés en los paquetes uno, dos y tres y, finalmente, la estadounidense KBR en los paquetes uno, cuatro y seis.
La refinería de Dos Bocas, Tabasco, está conceptualizada para construirse en un plazo de tres años y en la etapa de operación y mantenimiento se estima una vida útil de 20 años.
Sin embargo, según el estudio de Impacto Ambiental, elaborado por el Instituto Mexicano del Petróleo, la vida del proyecto puede incrementarse al realizar inspecciones y mantenimiento adecuado.
Incluso, si por razones de estrategia productiva, económica o ambiental o alguna otra, se decide acortar o alargar el tiempo de vida útil de la refinería, se podrá tomar la decisión de sacar de operación las obras o algunos de sus componentes sin abandonó del sitio.
El complejo en Tabasco constará de 17 plantas de proceso e infraestructura de servicios y tendrá capacidad para procesar 340 mil barriles diarios de petróleo crudo tipo Maya o pesado.