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Después de crecer al menor ritmo en siete años, el crédito hipotecario va a repuntar en México por los sismos del mes pasado, opinan analistas.
El crédito a la vivienda otorgado por la banca comercial se incrementó 2.7% en agosto de este año con respecto al mes similar de 2016, una vez descontada la inflación.
Se trata del menor crecimiento real desde marzo de 2010, según datos del Banco de México (Banxico).
En particular, el financiamiento a la vivienda de interés social reportó un desplome de 11.1% en agosto, el más pronunciado en dos años, y significó la vigésimo quinta caída seguida.
Por su parte, el crédito a la vivienda media y residencial creció 4.5%, lo que representó el menor aumento en casi cuatro años.
El economista senior de Banorte, Alejandro Cervantes, anticipa que el crédito hipotecario va a repuntar ligeramente en el primer trimestre de 2018 debido a la mayor demanda de vivienda por los sismos del 7 y 19 de septiembre pasado.
Sin embargo, expuso que la desaceleración del crédito hipotecario es un indicador adelantado del comportamiento del consumo privado en los próximos meses, pues los hogares mexicanos sólo se animan a comprar una vivienda cuando confían en su propia situación financiera a futuro.
“La fuerte desaceleración del crédito a la vivienda refleja una posible desaceleración de la demanda interna a futuro”, comentó Cervantes.
Destacó el boom hipotecario que se registró en México en los últimos dos años, en parte, por las reformas estructurales aprobadas este sexenio.
El analista de Scotiabank, Luis Armando Jaramillo, coincide en que el crédito hipotecario puede repuntar en el primer trimestre de 2018, debido a la cantidad de recursos que se van a destinar para la reconstrucción y la reposición de las viviendas afectadas por los sismos, así como por la desaceleración de la inflación anual.
“Los procesos de reconstrucción van a tomar varios meses, pero hay una cantidad fuerte de recursos que se están planeando invertir en el corto plazo para la reconstrucción de viviendas, lo que será un aliciente para la economía en general”, consideró.
Sin embargo, Jaramillo no cree que el crédito a la vivienda alcance las tasas de crecimiento registradas a finales de 2015 y principios de 2016.
El financiamiento hipotecario reportó un índice de morosidad de sólo 2.4% de la cartera total en agosto.
Según Banxico, los créditos a la vivienda registraron una tasa fija promedio de 10.81% anual en agosto, la más alta desde 2013 para ese mes.