En enero, el gobierno federal se apretó el cinturón, al dejar de gastar 31 mil millones de pesos menos a lo programado, y la recaudación de impuestos se colocó por debajo de la meta.
Pero se logró un superávit primario que implicó que no se endeudó para pagar intereses de la deuda.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) confirmó que en el primer mes de 2019, las finanzas públicas registraron un superávit primario de 15 mil 907 millones de pesos cuando se preveía que sería un déficit de 614.3 millones de pesos.
Este saldo positivo es menor al superávit primario que se registró en enero de 2018, cuando fue de 36 mil 642 millones de pesos.
Al dar a conocer el Informe de las Finanzas Públicas y la Deuda, del primer mes de 2019 y bajo el escenario de ingresos y gasto delineado por el nuevo gobierno con base al paquete económico aprobado por el Congreso de la Unión, aseguró que los principales balances fueron mejores a lo programado.
Para enero se tenía previsto un gasto neto total de 542 mil 714 millones de pesos, pero sólo se ejercieron 506 mil 709 millones de pesos.
De ese monto, las dependencias gastaron 364 mil 998 millones de pesos cuando se tenían programados 380 mil 256 millones de pesos.
El mayor ajuste se presentó en los ramos autónomos con 55%. En el calendario de gasto se estimaban 10 mil 722 millones de pesos y se observó un monto ejercido únicamente de 2 mil 819 millones de pesos.
En tanto la recaudación de impuestos en enero sumó 318 mil 500 millones de pesos cuando la meta eran 325 mil 563 millones de pesos.