Para el sector inmobiliario, durante el año recién concluido, el mercado tuvo un desempeño más normal después del impacto que sufrió por la pandemia de Covid-19, pero para 2024 enfrenta una alta demanda de vivienda económica o popular que no se está construyendo, según especialistas del sector.
Marisol Becerra, directora de Consultoría de Tinsa México, comentó que en el país existe una alta demanda de vivienda, pero pese a que ha crecido la oferta en algunos segmentos y zonas, sigue existiendo un déficit para cubrir todos los requerimientos de la población.
Tinsa estima que cada año se demandan más de 450 mil viviendas, de las cuales la oferta se constituye por 270 mil viviendas nuevas y 202 mil usadas. Sin embargo, el factor precio es en el cual los compradores perciben una falta de oferta de vivienda con valor menor a 1.5 millones de pesos.
Lee también: SAT alerta a empresas: Declaración anual del 2023 vence en marzo
“Se hace más complicado atender a estos segmentos de la población por el encarecimiento de la tierra y los costos de construcción, que hacen que cada vez tengamos menos vivienda de interés social”, explicó Becerra en un seminario.
“Al haber menos oferta, se colocan menos créditos, pero la demanda se mantiene, porque la gente se sigue casando, se sigue divorciando y teniendo hijos”, señaló.
De acuerdo con Tinsa, de enero a septiembre se colocaron 311 mil créditos hipotecarios, 3.5% menos respecto al mismo periodo del año anterior, lo que deriva de la falta de oferta de vivienda, especialmente en el segmento de interés social.
En 2015, la vivienda con valor de 372 mil a 630 mil pesos representaba 49% de las ventas, pero en 2023 ese porcentaje bajó a 21.5%, según Tinsa. En el segmento de 631 mil a 1.1 millones de pesos pasó de 19% a 26% en el mismo lapso.
Créditos caros
Para Enrique Téllez, codirector de Desarrolladora del Parque, la falta de oferta de vivienda nueva ocasiona la disminución del número de créditos colocados, lo que también responde a una percepción de altas tasas de interés en el mercado.
“Esto ha hecho que se tome la decisión de hacer menos inversión y, por lo tanto, menos construcción de unidades nuevas en la Ciudad de México, aunado a que, en particular, la capital del país tiene una complejidad para obtener permisos y eso hace que los desarrollos actuales, bien localizados, tengan un premio contra el resto del mercado”, explicó.
Lee también: Si ganas el salario mínimo, esto es lo que por ley te corresponde si trabajas el 1 de enero
Rodrigo Guízar, director general de Quality Inmobiliaria y miembro del Clúster de Innovación y Transformación Inmobiliaria (CITI), comentó que el mercado inmobiliario siempre ha sido complicado y el año pasado se notó una mayor demanda de vivienda usada.
“Este es el primer año donde la pandemia dejó de ser tan relevante y, al menos en materia de inmuebles usados, hemos sentido que ha habido más movimiento”, dijo.
“Estamos viviendo una sobreoferta, hay mucha gente queriendo vender y menos gente queriendo comprar. La gente con dinero está intentando diversificar sus recursos, como invertir en otros países, específicamente en Miami, Florida, en Estados Unidos, y en España”.
Dudas por elecciones
Para Guízar, la incertidumbre política será el reto más grande del sector inmobiliario en 2024.
“Las elecciones siempre son un motivo por el cual el mercado inmobiliario se detiene por un momento, pero eso también genera oportunidades para obtener crédito, ya que la gente que no calificaba porque los bancos tenían mejores postores ahora pueden obtenerlo más fácilmente”, expuso.
“Hacia 2024 yo veo un mercado más de compradores o inversionistas, pero lo que menos hay es inventario nuevo, porque se construye cinco veces menos que antes de la pandemia y el inventario que existe es de vivienda usada”, expuso.
La inflación también es una amenaza para el próximo año, ya que, si bien se ha moderado, ha ocasionado un menor ingreso y capacidad de pago disponible, de forma que las familias no han aumentado su nivel de ingresos al mismo ritmo que la inflación. Es decir, les alcanza para menos, dijo Becerra.
“Las tasas de interés también han aumentado, no de manera tan dramática como en otros países, pero sí han afectado a las hipotecas. El incremento de los costos de la construcción y el financiamiento también es un tema que vemos como amenaza, porque esto ha impactado los valores de venta y al cliente le alcanza para menos”, señaló.
Lee también: ¡Qué no se te pase! Aprende a cómo activar tu buzón tributario antes del 1 de enero de 2024
Tendencias del nuevo año
Entre las tendencias que dominarán este año destaca la evolución de la familia mexicana, pues ahora existen 11 tipos de familias y la tradicional (papá, mamá, hijos) sólo representa 25%.
“La definición de la familia mexicana ha cambiado de manera sustancial y tenemos que responder a ello”, comentó Téllez.
El aumento del turismo, que demanda rentas de corto tiempo, tener mascotas, viviendas cada vez más enfocadas a las necesidades de las mujeres y la sustentabilidad, también serán temas clave este año, dijo.