Pese a que no existe una legislación federal que prohiba el uso de bolsas de plástico en tiendas de autoservicio, es factible eliminarlas en todo el país, dijo la directora de Desarrollo y Responsabilidad Corporativa de Walmart, Claudia de la Vega.
“Estamos buscando que este tipo de iniciativas ya se federalice y que el país tenga una misma legislación para que empresas como nosotros y las industrias que se tengan que adaptar a estos cambios tengan certeza de que en todos los estados será lo mismo. Es un esfuerzo que debemos realizar como país”, dijo.
Entrevistada después del comienzo de la entrega de medio millón de bolsas reutilizables que la firma acordó realizar con el gobierno de la Ciudad de México, mencionó que la empresa buscará promover su uso entre los clientes en todas sus tiendas del país.
“Nos queremos adelantar y sensibilizar a toda nuestra clientela a que hacia allá vamos a llegar. Queremos ir un paso adelante y cumplir con esto en todos los estados, independientemente de las legislaciones que entren en vigor, es algo en lo que se debe avanzar”, dijo.
De la Vega explicó que ha habido buena respuesta en el uso de bolsas reusables o de mandado, y una vez que termine la entrega de 500 mil bolsas, Walmart seguirá vendiéndolas de forma habitual y con promociones. En el caso de productos perecederos, la directiva dijo que se han colocado bolsas compostables para su venta, tal y como indica la legislación; sin embargo, se permite el uso de recipientes para aquellos clientes que decidan no utilizar ningún tipo de bolsa plástica.
“Lo único que pedimos es que los contenedores que traigan estén totalmente limpios para garantizar la calidad de producto”.
De la Vega añadió que en el caso de Walmart se mantiene la presencia de los empacadores en el área de cajas, de manera que la eliminación de las bolsas de plástico solamente implica un cambio en la forma de guardar las compras.
“Sólo ha cambiado la forma de empacar”, dijo.
Por su parte, el secretario de Desarrollo Económico de la Ciudad de México, Fadlala Akabani, aseguró que en el caso de comida para llevar, se buscará un esquema en el que la gente lleve sus recipientes para evitar el uso de plástico.
En el caso de comida de entrega a domicilio, se buscará implementar un modelo de plásticos retornables, en el que los comercios lleven los alimentos en recipientes que después puedan ser devueltos para otro uso por parte de sus clientes.
“Se trata de un cambio de paradigma histórico en el consumo de la Ciudad de México”, dijo.
