México es un país petrolero rico, pero la explotación futura de esos recursos quedará en su gran mayoría en manos del Estado, a través de Petróleos Mexicanos, de acuerdo con la Secretaría de Energía (Sener).

En su Plan Quinquenal de Licitaciones para la Exploración y Extracción de Hidrocarburos 2020-2024, la dependencia asegura que el país dispone de un potencial de 112 mil 946 millones de barriles de petróleo crudo equivalente no descubierto técnicamente recuperable, “lo que equivale prácticamente al doble de los recursos extraídos en el país en los últimos 100 años”.

De ellos, 57% corresponde a recursos no convencionales y 43% a convencionales.

El documento publicado ayer sostiene que “la nación aún cuenta con gran potencial, que a través de las actividades petroleras —de la mano de Pemex— para la evaluación y reclasificación de estos recursos, serán traducidas a reservas”.

Detalla que se programará la extracción en la medida de que lo demanden las refinerías que opera Pemex (no contempla a la nueva refinería de Dos Bocas) y no se descarta que la producción de privados sea vendida al Estado o usar el inventario de áreas para apoyar las metas de producción del Plan Nacional de Desarrollo.

El gobierno, a través de la Sener, reconoce que no rehúye a considerar los recursos no convencionales como el crudo y el gas shale, pero señala que aunque son la mayor proporción de los recursos prospectivos, “no han sido documentados”.

Lo anterior refuerza la premisa de que, para aumentar el conocimiento de estas áreas, la incorporación de reservas y la producción de hidrocarburos es necesario incentivar la inversión en estudios exploratorios, particularmente en el área del golfo de México Profundo y de las cuencas precursoras de recursos no convencionales.

Incluso, abre la posibilidad de evaluar el desempeño de 103 contratos de exploración y producción (CEE) vigentes, adjudicados en pasadas rondas de licitación a privados, “identificando los mejores escenarios para el desarrollo” del país.

Sin embargo, la Sener detalló que se realizará una evaluación anual de los mismos y, en razón de los resultados, se actualizará el contenido del plan quinquenal, ya que no es posible garantizar técnicamente la producción de algunos contratos.

Por ello, el gobierno priorizará inversiones en aguas someras y terrestres convencionales, “relegando” actividades en aguas profundas y terrestres no convencionales, considerando restricciones presupuestales, requerimientos de incorporación de reservas, nuevos descubrimientos y riesgo de incumplimiento en ejecución de CEE.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses