La industria automotriz seguirá padeciendo la falta de semiconductores al menos hasta la segunda mitad de 2022, de acuerdo con un análisis de IHS Markit.
La falta de capacidad de los fabricantes de semiconductores afectará la disponibilidad de estos insumos para la elaboración de componentes automotrices como sensores, fuentes de alimentación y dispositivos para automatización de los vehículos. En un reporte, IHS Markit expuso que la mayor parte de las plantas de fabricación y pruebas de semiconductores se ubica en China, Corea del Sur, Japón, Singapur, Filipinas, Indonesia, Tailandia, Vietnam y Malasia, donde, a excepción de Singapur y Malasia, la tasa de vacunación contra el Covid-19 es de menos de 6% de la población, por lo que las empresas siguen laborando a un menor ritmo de lo normal.
“En varios de estos países las tasas de contagio se han incrementado en las últimas dos semanas y permanece el riesgo, que impacta a la fuerza laboral”, indicó IHS Markit.
“Esto amenaza a los fabricantes de semiconductores en los lugares de ensamble y prueba, así como a los trabajadores necesarios para trasladar los productos terminados a los centros de distribución para su exportación global”, señaló.
Fabricantes como Intel e Infineon ya advirtieron que la escasez de semiconductores podría prevalecer todo el próximo año.
Toyota, uno de los fabricantes que no había reportado afectación en sus líneas de producción por falta de chips, anunció esta semana que reducirá en 40% la producción de vehículos durante septiembre en 14 plantas de todo el mundo.
De acuerdo con la Industria Nacional de Autopartes (INA), de enero a julio se han dejado de fabricar 5.1 millones de vehículos en todo el mundo por falta de semiconductores, es decir, 6.3% de los 82 millones de unidades que se tenía previsto elaborar durante este año.
Norteamérica y Europa son las regiones más perjudicadas por la falta de chips. En la primera se dejaron de producir 1.6 millones de vehículos, siendo Estados Unidos el país con mayor afectación, con un millón 37 mil 934 unidades; seguido de México, con 328 mil 495 vehículos, y Canadá, con 248 mil 331.
En tanto, en Europa se dejaron de fabricar 1.3 millones de vehículos de enero a julio.