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Si el próximo gobierno y el partido mayoritario en el Congreso siguen con decisiones que generan incendios e incertidumbre, se cometerá el error de iniciar el sexenio con un “mal compañero”: la desconfianza, dijo el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gustavo de Hoyos.
“Es la tercera ocasión que el gobierno electo tiene que salir a controlar los efectos por la pérdida de confianza. Primero con el aviso infortunado de la suspensión del aeropuerto de Texcoco, luego con la iniciativa de controlar comisiones bancarias, y tercero por el infortunado anuncio de la consulta nacional. Lo que esperamos es que no se siga dilapidando la confianza, porque si se vulnera la certidumbre, la desconfianza es un mal compañero para el inicio de un gobierno”, comentó.
Por ello, pidió actuar con responsabilidad, con legitimidad electoral y responsabilidad en el ejercicio público: “ Se está a tiempo para que este tipo de errores no se presenten a partir del 1 de diciembre”.
Explicó que la gran prueba de fuego sobre la responsabilidad del próximo gobierno se dará en la aprobación del paquete presupuestal.
“Estaremos atentos a que el presupuesto que se presente mantenga superávit primario, que sea sustentable, que atienda preocupaciones legítimas que expresan gobernadores y alcaldes; no queremos un gobierno federal glotón del presupuesto”, añadió.
Durante la presentación de Exigencias al Nuevo Gobierno, Tercera Entrega de Data Coparmex, De Hoyos se refirió a los retos de la próxima administración: “El aumento de la inseguridad ha tomado niveles alarmantes, coincidimos que es una de las prioridades impostergables”.
Por ello, exigió “que desde el primer día de la administración no haya recurso técnico ni material que no se emplee para este flagelo”.
De acuerdo con los resultados de la tercera encuesta que realizó la Coparmex entre empresarios, la percepción de inseguridad de febrero a noviembre subió 20 puntos, para llegar a 58%, por robos de mercancía, hormiga y de autos con los mayores registros, expuso la asesora económica de Coparmex, Viridiana Ríos.
Oaxaca fue el estado donde más subió la victimización, mientras que registraron menores índices Tlaxcala, Yucatán y Querétaro.
Entre los rezagos que tiene el país está la falta de claridad en el gasto público, ya que hay 28 mil 382 millones de pesos cuyo uso no se hizo conforme a lo declarado.
Está también como pendiente de atender los altos niveles de deuda en estados como Nuevo León, Quintana Roo, Chihuahua y Coahuila.