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A lo largo de los últimos siete meses, analistas casi duplicaron sus proyecciones de inflación para final de año, debido al incremento en los precios de las materias primas y los múltiples cuellos de botella que se registran en las cadenas de producción.
La inflación, conocida como el impuesto de los pobres por dañar más a quienes menos tienen, va a cerrar este año en 6.1%, de acuerdo con 28 instituciones consultadas esta semana por CitiBanamex.
Sin embargo, hace siete meses, es decir en febrero pasado, las mismas instituciones calculaban una tasa de inflación de 3.7% para el cierre del presente año.
Esta última tasa todavía se mantenía debajo de 4%, el rango máximo de tolerancia definido por el Banco de México (Banxico) como marco para la conducción de su política monetaria.
Debido a la pandemia de Covid-19, la economía global pasó del cierre total y parcial de actividades, a un escenario de expansión vigorosa del gasto, especialmente en las economías avanzadas, señala el reciente informe trimestral de Banxico.
Los analistas no contaban con que esto propiciaría importantes cuellos de botella en la producción así como presiones inflacionarias externas, mismas que se transmitirían a la inflación interna, mediante los aumentos en los precios de bienes comerciables y de diversos costos de insumos
de producción, transporte y distribución.
En particular, BBVA prevé actualmente un nivel de 6.35% para final de año, pero en febrero proyectaba una inflación de 3.50%, mientras que CitiBanamex elevó su pronóstico de 3.54% a 6.13% durante el mismo lapso.
Banorte pasó de estimar una tasa de 3.70% a 6.10%; Santander cambió de 3.50% a 6%, mientras que J.P. Morgan modificó su expectativa de 3.40% a 6%.
El ajuste más significativo lo realizó Vector Casa de Bolsa, propiedad del exjefe de la extinta Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, al elevar su proyección de 3.6% a 7% para este año.
Prevén arriba de 5% en 2022
El Inegi dará a conocer mañana su informe de inflación correspondiente a la primera mitad de septiembre y las instituciones encuestadas por CitiBanamex prevén que repunte a 5.72% y siga ganando fuerza en los meses siguientes, después de registrar un piso durante agosto.
Banxico estima que la inflación se mantendrá arriba de 5% hasta principios de 2022 y luego disminuirá converger a su meta de 3% durante los primeros meses de 2023.
Ante esta expectativa, los analistas consultados consideran que el banco central aplicará una tercera dosis de política monetaria, subiendo su principal tasa de interés de 4.50% a 4.75% el jueves de la siguiente semana.
Además, anticipan que la tasa vuelva a subir en noviembre o diciembre para cerrar el año en 5%, el mismo nivel que tenía en agosto de 2020.
Hace siete meses, los mismos especialistas estimaban que el tipo de interés terminaría el año en curso en 3.75%.
Entre los principales riesgos para la inflación, Banxico señala las diversas presiones de costos para las empresas, episodios de depreciación del peso frente al dólar y aumentos en los precios agropecuarios por condiciones de producción nacional o por la sequía en varias regiones de Estados Unidos.
Finalmente, las instituciones consultadas por CitiBanamex estiman que la economía mexicana va a rebotar 6.2% durante 2021, aunque hace siete meses esperaban un crecimiento de 3.9%.
Esta expansión se daría luego de que la producción nacional se desplomó más de 8% el año pasado, siendo su peor desempeño en casi nueve décadas.
