Después de dos años complicados para la industria de cosméticos, con una elevada inflación y falta de materias primas, el mercado mexicano se ha vuelto interesante para Avon, de manera que el principal reto es volver a crecer en el país.
En entrevista con EL UNIVERSAL, el director general de la firma en México, Alexandre Lemos, explicó que la guerra en Ucrania colocó al país como el segundo mercado más importante después de Brasil, cuando antes era rebasado por Rusia. Además, se prevé que al concluir el conflicto, se mantenga sin cambios la nueva ubicación de geografías para la compañía.
Lemos destaca que los aumentos de precio por parte de la firma han sido menores a los actuales índices inflacionarios, en un escenario donde está preparada para un consumidor más prudente.
“Los costos aumentan mucho, gran parte por el tema energético y falta de productos. En determinado momento falta materia prima, además del aspecto logístico, que nos ha obligado a buscar alternativas, otros productos, otras fórmulas”, destacó. “Hoy la cercanía es importante, tener una planta en Celaya es un diferencial competitivo”, dijo.
De acuerdo con datos de la consultora Nielsen, la venta de cosméticos en México registró un crecimiento anual de 8% al cierre de 2021; sin embargo, en el contexto actual hay más prudencia de los consumidores, quienes limitan gastos y buscan marcas y presentaciones más accesibles.
Lemos dijo que en el corto plazo Avon se mantendrá en el plan de inversión y se apoyará en su fuerza de ventas que, lejos de reducirse por la pandemia y la digitalización, se ha adaptado.
“La digitalización no viene para competir, viene para aportar valor. Ofrece alternativas para vender y, a partir del momento en que se comparte con el grupo de amigas el catálogo digital, lo que habíamos visto que pasaría en cinco o seis años, pasó en unos cuantos meses”, dijo.
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