Cartera

“El nuevo TLC dará certeza a economía”

El pacto comercial es un instrumento que va a blindar al país del proteccionismo, comenta; el próximo gobierno apostará a fortalecer el mercado interno y la economía global, dice

Los integrantes del equipo de transición Alejandra Frausto, Jesús Seade, Marcelo Ebrard y Graciela Márquez, en conferencia de prensa sobre el nuevo acuerdo comercial alcanzado entre México, Estados Unidos y Canadá. JUAN CARLOS REYES. EL UNIVERSAL
02/10/2018 |02:59Ivette Saldaña |
Redacción El Universal
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maria.saldana@eluniversal.com.mx

La próxima titular de la Secretaría de Economía, Graciela Márquez Colín, reconoce que la conclusión del acuerdo trilateral fue fundamental para el país, porque sin el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC) México hubiera enfrentado las políticas proteccionistas de Estados Unidos, lo que “nos hubiera llevado a un complicado panorama”, dice.

Para el próximo gobierno federal uno de los principales aspectos que se obtuvieron con el acuerdo fue la certidumbre para las inversiones y la protección de la soberanía en el sector energético del país.

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Detalla que para la administración que próximamente encabezará Andrés Manuel López Obrador fue importante dejar en claro que en el tema energético se reafirme la soberanía del Estado mexicano para ser el rector de esas actividades y para que puedan hacerse reformas a la Constitución o a las leyes del sector.

En entrevista con EL UNIVERSAL, la economista añade: “Lo que pedimos es simplemente que se reafirmara esa soberanía del Estado mexicano para que quedara clara la rectoría sobre las actividades del sector energético”, específicamente “reconociendo nuestro derecho soberano a reformar la Constitución y leyes nacionales”.

Para la profesora e investigadora de El Colegio de México, en el actual entorno han surgido medidas proteccionistas. Por ejemplo, Estados Unidos es un país “protagonista de bloqueos” comerciales, por lo que debe verse al nuevo acuerdo comercial United States, Mexico and Canada Agreement (USMCA, por sus siglas en inglés) como un instrumento necesario para dar certidumbre al nuevo gobierno, a la inversión y al comercio.

“Por eso fue tan importante el cierre de la negociación del tratado, porque es un instrumento muy importante frente al giro proteccionista que hay en el mundo. Por eso es tan importante este paso, es de celebrar esta conclusión, porque la disyuntiva pintaba un panorama complicado”, dice la doctora en Historia Económica por la Universidad de Harvard.

Rechaza que vayan a enfrentar al proteccionismo de otros países con más proteccionismo y se le seguirá apostando al fortalecimiento del mercado interno y a la economía global.

Fricciones

Al referirse a las fricciones comerciales que existen entre México y Estados Unidos, dice: “En el comercio exterior siempre hay fricciones y tienen que ser estudiadas, ver cuál es el origen exacto de la fricción y ver dónde podemos actuar y modificar o ver si es un giro proteccionista”.

Márquez Colín advierte que todas las fricción que pudieran presentarse serán analizadas, pero no las considerarán como rompimiento con la otra nación, pues de lo que se trata es precisamente de buscar una salida.

Márquez Colín, quien es parte del Sistema Nacional de Investigadores, comenta que, si bien en todo acuerdo se cede, también se gana en otros, y considera que lo más importante es que con el tratado se logrará dar certidumbre.

Explica que la firma del tratado se daría entre el 29 o 30 de noviembre y quedaría a cargo de la actual administración de Enrique Peña Nieto, y después de que se dé la firma se iniciará el proceso de discusión, análisis y de ratificación del tratado por parte del Senado.

Menciona que en reglas de origen del sector automotriz se abre una ventana de oportunidad para trabajar en cambios tecnológicos en el periodo de transición, lo que incluye impulso a la industria para que se inserte en las cadenas de valor.

Se trabajará en una política industrial, la cual va más allá del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, “lo que hagamos a favor de la industria nacional, para insertarse en las cadenas productivas, pero la política industrial va más allá. Va a buscar la integración de cadenas de valor, que las pymes puedan ser formar parte de la cadena de proveeduría de las empresas exportadoras y por tanto que generen el empleo y reciban los beneficios de la economía global”.

No se trata de sustitución de importaciones, “sino de incorporar a las empresas que han quedado al margen de la tendencia exportadora, incorporarlas a la tecnología, certificación, siendo proveedoras de estas otras empresas que están exportando, para eventualmente las que se insertan a cadenas de valor”, explica la próxima secretaria de Economía.

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