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El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, afirmó que las expectativas en materia de inflación para 2018 son de tres por ciento, lo que representa un activo muy importante para el país, que se reflejará en mayor inversión y empleo.
Si, hay cambios en los productos agropecuarios pero no son aumentos sostenidos en los precios, ni generalizados, los que tiene que cuidar la política monetaria de Banxico, es que el índice general guarde una cierta estabilidad .
Carstens señaló que, las expectativas inflacionarias a mediano y largo plazo están muy estables, pues si bien la última cifra de inflación fue de 6.59 por ciento y se espera una caída rápida de la inflación el próximo año para que lleguemos a 3 por ciento en 2018 y muy similar para 2019.
Reconoció que el aumento del índice inflacionario obedeció al tema del “gasolinazo” y una alza en los productos agropecuarios, pero afirmó que en una semanas los precios de estos últimos se ajustarán a la baja.
“Estamos en camino a la convergencia del tres por ciento, gracias a una política monetaria oportuna que ha permitido esta dinámica se presente”, señaló el gobernador del Banxico.
Agregó que es un verdadero activo para el país que estemos en un proceso muy estable, pero no es algo que debamos tener por dado, pues el Banco de México debe estar atento para tomar decisiones que permitan absorber los choques que se presenten de manera más efectiva.
Al final, esta situación de estabilidad de precios, dijo Carstens, terminará reflejándose en mayor inversión y empleo, objetivos que debe perseguir una política económica.
El funcionario participó como ponente en un seminario organizado por la Facultad de Economía de la UANL , para celebrar el 60 aniversario de su fundación en dónde puntualizó que si la inflación es elevada y volátil dificulta las decisiones de largo plazo porque incrementa la incertidumbre y disminuye el valor del dinero.
“Por eso una de las tareas fundamentales de la macroeconomía es hacer que el ahorro de la población se conviertan en inversiones productivas”, expresó Carstens y agregó que las personas de más bajos ingresos son los que tienen las menores posibilidades de cubrir los riesgos contra este fenómeno que la postre se convierte en un impuesto altamente regresivo.
"Mientras; la estabilidad de precios es condición indispensable, más no suficiente para un crecimiento sostenido", expresó el gobernador del Banxico.
kcp