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Francisco Hernández Juárez, secretario general del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), pidió a los trabajadores de Telmex que estén atentos y preparados en caso de tener que “tomar decisiones difíciles”.
En un video compartido con los sindicalizados, Hernández Juárez explica que el 16 de abril se instala la asamblea general para resolver el problema, pues el 25 de ese mismo mes vence su contrato colectivo.
“Estamos a unos días del vencimiento de nuestro contrato colectivo, el 25 de abril a las 12 del día y en esta ocasión además de la revisión contractual tenemos un doble emplazamiento porque tenemos presentado el de violaciones del contrato relacionado con las decisiones del IFT por la separación funcional”, comenta el líder sindical.
Hernández Juárez asegura que el sindicato trabaja para hallar una solución negociada; sin embargo, eso no es obstáculo para luchar contra la decisión política del regulador.
“Tiene que ver con proteger empresas que son aliados de ellos, con proteger otro tipo de intereses y nada que tenga que ver con los intereses del país”, asegura.
El IFT resolvió que Telmex debe llevar a cabo una separación funcional donde se divida en dos empresas, una dedicada a ofrecer servicios a usuarios finales y otra que dé servicios mayoristas.
División de Telmex fracasará. Hernández Juárez señala que la separación funcional daría resultados si hubiera realizado un análisis de impacto económico.
“Sabemos que va a ser un fracaso ese proyecto porque es obvio que si obligan a Telmex a dar sus precios debajo de sus costos, es una empresa que financieramente va a nacer quebrada y no va a responder a sus obligaciones ni laborales ni las que están comprometidas para dar mejor servicio y atender a mayoristas”.
De acuerdo con el secretario del STRM, el instituto fue contra sus propias normas, pues durante tres años, en su página de internet, reportó que Telmex había cumplido con las medidas asimétricas y, a pesar de eso, impusieron la medida drástica de separación funcional.
“A nosotros nos pone en un predicamento porque es una situación que pone en riesgo nuestras condiciones laborales individuales y colectivas”, subraya Hernández.
