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La economía mexicana tuvo una contracción de 0.3% en términos reales durante el tercer trimestre de este año respecto al mismo periodo precedente, según cifras ajustadas por estacionalidad y con base en los resultados del Producto Interno Bruto (PIB), informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Dicho retroceso fue ligeramente mayor a la disminución de 0.2% estimada inicialmente por el instituto el pasado 30 de octubre, debido a que la desaceleración del sector industrial fue superior al reportado de manera preliminar.
La actividad económica en el tercer trimestre del año estuvo bajo la influencia de tres factores: el impacto de los sismos sobre las cifras económicas de septiembre, la recesión en la minería y la caída de la construcción derivada del esfuerzo de consolidación fiscal llevado a cabo por el gobierno federal, explicó Alejandro Cervantes, economista de Banorte-Ixe.
Por componentes, el PIB de las actividades industriales registró su segunda baja consecutiva al retroceder 0.6%, tasa superior a la caída de 0.5% prevista inicialmente.
El sector se vio afectado principalmente por la contracción de 4.8% de las actividades mineras y la construcción, que retrocedió 0.5%.
A pesar de que la industria manufacturera reportó un crecimiento de 0.1%, este fue el más débil de los últimos cuatro trimestres.
La debilidad se explicó por un fuerte retroceso de 4.8% en el comercio minorista, así como por la disminución de 0.4% en servicios de transporte y el nulo avance de los servicios inmobiliarios.
El sector primario, que comprende las actividades agropecuarias, fue la única de las tres grandes divisiones de la economía que alcanzó un crecimiento en el tercer trimestre del año de 0.5% frente al trimestre anterior, luego de que en los dos primeros trimestres del año había reportado cifras negativas.
En su comparación anual, el Producto Interno Bruto registró un incremento real de 1.6% durante el periodo julio-septiembre de este año con relación al mismo lapso de 2016, tasa inferior a la de 1.7% estimada anteriormente.
Dicha tasa es la más baja desde el primer trimestre de 2014.
Por grandes actividades económicas, el PIB del sector servicios se elevó 2.5% y el del sector agropecuario 0.8%, en tanto que el de las actividades industriales descendió 0.7% con relación al tercer trimestre de un año antes, una baja ligeramente superior a la contracción de 0.5% reportada anteriormente.
El Inegi también informó que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE), un aproximado al PIB mensual, cayó 0.5% en términos reales durante septiembre de este año frente al mes precedente, con cifras desestacionalizadas, como consecuencia de los sismos registrados en ese mes.
Por grandes grupos de actividades, los servicios cayeron 0.8% y las industriales 0.4%. Las agropecuarias presentaron un crecimiento de 3.5% en el septiembre respecto al mes previo.
Las cifras actuales sugieren que la demanda interna se desaceleró en el tercer trimestre, aunque ello se debió en parte al impacto de los desastres naturales que afectaron al país en ese periodo.
“Estimamos una mejoría durante los próximos trimestres, donde las labores de reconstrucción apoyarán a la recuperación económica, aunque prevemos que ésta avanzará probablemente a un ritmo moderado”, comentó Eduardo González, analista económico de CitiBanamex.
