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maria.saldana@eluniversal.com.mx
La reforma fiscal de Estados Unidos va a afectar a la economía mexicana, sobre todo por el poco espacio tributario que tiene el país para reducir las tasas de impuestos, dijo la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Alicia Bárcena.
“México tiene pocos espacios tributarios porque su tasa es muy baja, mientras que la evasión y la elusión fiscal son altas y se tienen que poner todas las perspectivas.
“Si baja la tasa corporativa en Estados Unidos y en México también, hay que analizar qué puede suceder, pero obviamente sí va a haber un impacto”, comentó la responsable del organismo internacional.
Ayer, el Congreso de Estados Unidos aprobó la reforma tributaria, en la que incluye una reducción de impuestos por casi 1.5 billones de dólares en 10 años. Uno de los ejes del ajuste fiscal es la reducción al gravamen de empresas, que pasa de 35% a 21%.
Alicia Bárcena dijo que no es necesario que el país reaccione de manera inmediata, porque si bien en Estados Unidos se decidió reducir la tasa de impuestos, todavía hay que hacer un análisis fino porque es muy probable que suba ese porcentaje una vez que se consideren las tasas estatales, las cuales pueden incrementarse.
“De manera inmediata hay otros factores que hacen a México atractivo, en relación a su ubicación, recursos, mano de obra, cadenas de valor. Aunque se tendrá que hacer un análisis de sus impuestos corporativos, porque efectivamente hay un impacto”, explicó durante la presentación del informe del Panorama Social de América Latina 2017.
Adversidad comercial. La representante de la Cepal comentó que otro problema que reconoce el organismo es el resultado que tendrá la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), porque en el escenario extremo de que termine habrá una afectación de 1.1 puntos porcentuales del PIB.
Además del efecto negativo sobre el crecimiento económico, otro problema de un mal resultado de la modernización del acuerdo comercial es el incremento de la pobreza, añadió.
“Analizamos varios escenarios: si concluye; si se moderniza, pero con aumentos de importación; si sigue con ajustes proteccionistas; si se cancela y se aplican aranceles de nación más favorecida o si termina y no hay aranceles de nación más favorecida, aplicado por la Organización Mundial del Comercio”, añadió.
En un escenario optimista, donde siga vigente el TLCAN, no se prevé un impacto. Esta posibilidad, aceptó, es poco factible. En el modelo moderado, dijo que prevén una contracción en el PIB de 0.2%; en el pesimista, la disminución llega a 0.6%; sin embargo, en el extremo prevén una caída de 1.1%, “donde nos va como en feria”.
Crece pobreza. De visita por México, Bárcena explicó que la pobreza y pobreza extrema en América Latina aumentó de 168 millones a 186 millones de personas entre 2014 y 2016.
En el caso de México, expuso que la pobreza descendió en los últimos 10 años, aunque la tendencia puede romperse en 2017 como consecuencia de los sismos de septiembre y de los huracanes que afectaron el país.
En 2014, el porcentaje de latinoamericanos en pobreza fue de 28.5% y subió a 30.7% en 2016.
“En 2016, el número de personas en situación de pobreza llegó a 186 millones, incluyendo 61 millones en situación de pobreza extrema”, aseguró la secretaria Ejecutiva de la Cepal.
En 2017, en América Latina se espera se registre un incremento de un millón de personas más en extrema pobreza, con lo que la cifra puede subir a 62 millones y hacer un total de 187 millones de personas.
Sin embargo, la cifra es menor al máximo visto en 2002, cuando se registraron 233 millones de pobres en la región, de los cuales 63 millones estaban en condición extrema.
De acuerdo con Bárcena, la cifra de 2016 está 15.2 puntos porcentuales debajo de la cifra de 2002.
Si bien bajó la pobreza, la desigualdad en la distribución del ingreso se redujo de 2002 a 2014, aunque la disminución es cada vez menor en los años recientes. La desigualdad en términos de ingreso cayó de 2002 a 2016, de acuerdo con el coeficiente de Gini, que pasó de 0.538 a 0.467.
Entre más se acerque a un punto la desigualdad es mayor y el 0 es ausencia de desigualdad.