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La subcontratación de personal puede ser un mecanismo que facilite el empleo en el momento que la economía empiece a reactivarse, siempre y cuando se haga dentro de la ley, comentó Pablo Lezama, director general de la Asociación Mexicana de Empresas de Capital Humano (AMECH).
“Definitivamente la subcontratación es un facilitador para desarrollar la economía y los derechos de los trabajadores, siempre y cuando se haga legalmente, porque lo que hay que tener mucho cuidado es que no vaya a proliferar, o vaya a ser un campo de oportunidad para el outsourcing ilegal”, advirtió el directivo.
Lezama considera que hay que mirar el problema de manera muy integral. “Estamos atravesando por una época de pérdida de empleos, negocios que están cerrando, como le vamos a hacer para que la economía se pueda reactivar, y en términos de trabajo, lo importante es que la gente tenga trabajos con seguridad social, con infonavit, que paguen impuestos, y que contribuyan al desarrollo del trabajador”.
“Las empresas de subcontratación que trabajan dentro de la ley deben distinguirse por enriquecer a los trabajadores, si eso no sucede vamos a tener problemas, pero si a eso se sumas que las empresas de subcontratación informales no pagan impuestos, no tienen registro en el IMSS, que evaden las obligaciones del trabajador y que en lugar de enriquecerlo lo empobrecen, pues eso no va a poder funcionar”.
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En opinión de Lezama, las empresas de subcontratación legal son una palanca para desarrollar el empleo y la economía de las empresas. “Estas empresas hicieron un esfuerzo muy importante y buscaron mantener sus plantas de trabajadores, al menos hasta marzo no hubo una pérdida considerable de empleos en estas empresas”.
Las pérdidas de empleo que empezaron a suceder en la subcontratación, como en el mercado laboral en general, fue en sectores como los restaurantes, todo el tema de servicios, las actividades consideradas no esenciales, que tuvieron que empezar a cerrar, ahí es dónde está pegando más fuerte.
Por el contrario, donde ha habido mayor demanda ha sido en los servicios médicos, enfermeras, hospitales, laboratorios, todo el sector de logística, hay demanda de trabajadores por parte de las empresas, y lo que hacen las empresas de subcontratación legal, abren los espacios para contratar, incluso en línea, y conectan con las empresas que están solicitando trabajadores, explicó Lezama.
“Otros empleos que se han mantenido, están por ejemplo en los call centers y en general todo el trabajo que se puede hacer como teletrabajo, desde la casa, tienen un impacto menor”.
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Ahora bien, en opinión del directivo, la subcontratación legal tiene diferentes ventajas a la hora que empiece la reactivación del empleo. Primero son empresas que tienen un despliegue a nivel nacional algunas de ellas, otras por región, otras en las ciudades más importantes, pero hay un despliegue importante.
“Entonces es muy fácil que el desempleado pueda encontrar alguna empresa de tercerización para enviar su currículum o solicitud de trabajo ya sea vía electrónica o vía física, Eso va a ser más fácil que buscar a una empresa que no se sepa quién sea ni dónde está y qué tipo de trabajo ofrece, porque estas empresas han invertido mucho dinero para tener presencia”.
Estas empresas de subcontratación tienen contacto con otras empresas que andan buscando mano de obra, perfiles de diferente tipo para ser contratados. Es un punto de encuentro entre quienes requieren trabajo y quienes lo necesitan. Facilitando que la gente pueda trabajar, incluso desde sus casas o en los sectores esenciales.
Por otro lado, ofrecen también cursos de capacitación en línea, en preparación que tienen que ver con recursos humanos, y facilitan que pueda lograrse el contacto y el desarrollo del trabajo específico, agregó el director de la AMCH.
shgm
