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La brecha de ingresos entre los hogares con mayores percepciones contra aquellos de menores entradas en México aún persiste amplia.
El 30% de los hogares con mayores retribuciones (decil VII, IX y X) concentraron 63.3% de los ingresos corrientes totales, mientras que 30% de los hogares con menores recursos participaron apenas con 8.9%, informó el Inegi.
Al dar a conocer los resultados de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2016, destacó que la diferencia se acentúa si se comparan los hogares más ricos con los más pobres.
De acuerdo con los datos, los hogares con mayores ingresos captaron hasta 21 veces más recursos que aquellos más pobres.
Dividiendo el total de los hogares en 10 bloques iguales y ordenándolos de menor a mayor nivel de percepciones se obtienen los deciles para analizar la distribución de los ingresos, explica el Inegi.
Los hogares del primer decil tuvieron un ingreso promedio de 8 mil 166 pesos al trimestre, es decir, 91 pesos por día, que en términos de los perceptores se traduce en un poco más de 37 pesos diarios.
En el décimo decil, el ingreso fue de 168 mil 855 pesos, mil 876 pesos diarios, que en términos de perceptores implica 766 pesos diarios.
El coeficiente de Gini, un indicador que se incluye en la encuesta y que permite hacer una aproximación a la desigualdad o heterogeneidad del ingreso de los hogares se ubicó en 0.448.
Entre más cercano a cero se encuentre ese indicador refleja hogares con mayor homogeneidad, mientras que más cercano a uno indica mayor desigualdad.
Si los hogares en México no tuvieran las transferencias recibidas, sea por familias en el extranjero o por apoyos gubernamentales o de otros, el coeficiente de Gini se incrementaría a 0.499, detalló la institución.
El presidente del Inegi, Julio Santaella, explicó que esta es la primera vez que se levanta la ENIGH con representatividad simultánea en ingresos y gastos tanto a escala nacional como por entidad federativa.
También destacó que por primera vez se da apertura de ámbito rural y urbano para cada una de las entidades federativas, además del ámbito nacional.
Diferencias urbanas y rurales. La ENIGH detalló que a nivel urbano los hogares percibieron un ingreso del doble de lo que obtuvieron aquellos de las áreas rurales.
En las localidades menores de 2 mil 500 habitantes (rurales), el ingreso corriente promedio trimestral por hogar fue de 26 mil 4 pesos en 2016, mientras que en las localidades de más de 2 mil 500 pobladores (urbanas) fue de 52 mil 215 pesos.
Por entidad federativa, Nuevo León y la Ciudad de México presentaron el mayor ingreso corriente promedio trimestral por hogar, al presentar valores de 87 mil 653 y 70 mil 834 pesos, respectivamente.
Los estados con las menores percepciones fueron Guerrero y Chiapas con 26 mil 980 y 23 mil 258 pesos, respectivamente.
En las áreas urbanas, los dos mayores ingresos promedio trimestral por hogar se registraron también en Nuevo León (91 mil 4 pesos) y en la Ciudad de México (70 mil 973 pesos), en tanto que los dos menores correspondieron nuevamente a Guerrero y Chiapas, con 31 mil 593 pesos y 31 mil 555 pesos, respectivamente.
Además de la ENIGH, el instituto dio a conocer los resultados del Modelo estadístico para dar continuidad a la sede histórica MCS-ENIGH 2008-2014, con la cual se calcula la pobreza multidimensional.
La encuesta y el modelo estadístico 2016 van a servir de base para que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) lleve a cabo la medición de la pobreza, cuyos resultados debe dar a conocer el próximo 30 de agosto.
