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El consumo de los hogares permitió que la economía mexicana creciera a su mayor ritmo en año y medio, lo que sorprendió positivamente a analistas.
El Inegi informó que la economía mexicana, medida con el PIB, se expandió 1.1% en el primer trimestre de este año con respecto al cuarto trimestre de 2017. Se trata del mayor crecimiento desde el tercer trimestre de 2016, cuando el PIB subió 1.2%, descontadas la inflación y la estacionalidad.
Las actividades relacionadas con los servicios, que contribuyen con dos terceras partes de la economía y están asociadas al consumo de los mexicanos, impulsaron el resultado tras crecer 1.2%.
La industria, que aporta la otra tercera parte de la economía mexicana y está más ligada con la demanda externa, subió 0.7%.
El economista sénior de Banorte, Alejandro Cervantes, expuso que el buen desempeño se debió al consumo de las familias.
Desde su perspectiva, las ventas minoristas alcanzarán un mayor dinamismo porque la inflación se está desacelerando y la creación de empleos se mantiene.
Espera que aumente la demanda externa de productos mexicanos por la depreciación del peso frente al dólar, que va a ocasionar la incertidumbre sobre el proceso electoral en México.
El coordinador de análisis de CitiBanamex, Eduardo González, cree que el crecimiento del PIB va a mejorar durante el resto del año, debido a una recuperación gradual del consumo interno, principalmente en el segundo semestre y un sólido crecimiento de la demanda externa.
El analista de Invex, Joan Domene, anticipa que las actividades relacionadas con los servicios se mantendrán como el principal motor de crecimiento.
