Como consecuencia de su labor para dar aviso de operaciones sospechosas en materia antilavado, los notarios del país han sufrido amenazas, secuestros y muertes por parte del crimen organizado.
“Hemos tenido casos de pérdidas de vida de notarios, de secuestros que varía en cada entidad; Tamaulipas, Guerrero y Michoacán se han visto afectados por ello”, denunció en entrevista el presidente del notariado mexicano, José Antonio Manzanero.
Admitió que desgraciadamente eso existe, en dónde gente del crimen organizado los amenazan y van contra la vida y personas, no sólo del notario y su familia.
“Es una realidad que a veces mucha gente no ve”, matizó.
Luego de inaugurar el 11 Seminario de actualización Fiscal organizado por el Colegio Nacional del Notariado Mexicano, denunció que no es la misma realidad que enfrenta un profesionista en Michoacán, Guerrero y Tamaulipas que el de la Ciudad de México.
“No se puede medir con la misma vara, la realidad de un estado contra otro”, ponderó.
Recordó que como notarios y el marco legal que tienen, cumplen con la identificación de los contribuyentes y su identidad así como dar avisos de operaciones sospechosas.
“En el marco normativo los notarios cumplimos cabalmente con nuestra función”, afirmó.
Refirió que tienen que acatar lo que se estable en diversas leyes como la Mercantil, de Identificación y Prevención de Operaciones con Recursos de Procedencia Ilícita en los que se señalan los umbrales de inversión en los que están obligados a reportar cuando el capital de una empresa es por arriba de 600 mil pesos.
En materia antilavado
los notarios están considerados como una actividad vulnerable a ser usada para el blanqueo de dinero y por lo tanto tienen que entregar un aviso al Servicio de Administración Tributaria (SAT) que sirve para que la Unidad de Inteligencia Financiera de la secretaría de Hacienda y Crédito Público pueda integrar alguna denuncia.
tcm