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El Inegi confirmó que durante el primer trimestre de 2018 la economía mexicana creció 1.1% respecto a los tres meses anteriores, con base en cifras ajustadas por estacionalidad, que es un referente más preciso de la evolución de la actividad productiva, porque elimina el efecto calendario causado por la Semana Santa.
El resultado implicó una leve aceleración en el ritmo de avance con respecto a 0.9% reportado el cuarto trimestre de 2017. De esta forma se constituye en el mejor crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) para los primeros tres meses del año desde 2010, cuando reportó un incremento similar y la tasa más alta desde julio-septiembre de 2016.
La actividad económica continuará avanzando en el corto plazo, aunque a un ritmo de crecimiento mensual más lento que el de los últimos dos meses del primer trimestre, dijo Eduardo González, analista económico de CitiBanamex. De ahí que el grupo financiero estima que el PIB en el segundo trimestre registrará una notable desaceleración en ritmo de avance trimestral, hacia una tasa de alrededor de 0.2%.
Por componentes, el PIB del sector servicios avanzó 1.1% en el trimestre enero-marzo de este año, explicado por el mayor dinamismo del comercio al mayoreo y menudeo (1.4% y 3.4%, respectivamente), aunado al mejor desempeño de otros rubros, como transportes, correos y almacenamiento (1.2%) y servicios financieros y de seguros (1.1%).
Las actividades agropecuarias registraron avance de 0.9% en los primeros tres meses del año, inferior al crecimiento de 2.8% observado en el trimestre anterior.
Por su parte, la producción industrial mostró un crecimiento de 0.9% en el primer trimestre, el avance más sólido de los últimos 10 trimestres. El incremento se explicó por el aumento de la industria de la construcción (2.8%) y de la generación y distribución de energía, agua y gas (0.7%), lo que sirvió para compensar el nulo avance de las manufacturas. Finalmente, la minería tuvo una contracción de 0.9%, derivado de la disminución en la producción petrolera.
En su comparación anual, el PIB registró un incremento real de 2.3% en el primer trimestre del año en curso con relación a igual lapso de 2017, cifra ligeramente inferior a 2.4% reportado inicialmente por el Inegi.
Por grandes sectores económicos, el PIB de las actividades agropecuarias se elevó a tasa anual 5.2%; el de los servicios 2.9%, y el de las industrias 0.3% respecto al periodo enero-marzo de un año antes.
Desaceleración en marzo. El Inegi también informó que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) desestacionalizado (un aproximado mensual para el PIB) aumentó en ese mes 0.3% respecto al mes previo, luego de reportar avance mensual de 0.7% en febrero.
Este menor dinamismo del IGAE reflejó un estancamiento en la actividad industrial en marzo (0.0% a tasa mensual), resultado de una ligera aceleración de las exportaciones, a pesar de que el sector de servicios registró un incremento mensual de 0.6% en marzo, mientras que el sector primario crecía 2.6% mensual.
Hacia los próximos meses, el dinamismo de la actividad económica global, en específico el de Estados Unidos, aumentará la demanda de productos mexicanos y, por ende, la producción manufacturera. No obstante, prevalecen riesgos a la baja, como la austeridad de las finanzas públicas, el letargo de la inversión y la desaceleración del consumo, comentó Janeth Quiroz, analista de grupo financiero Monex.
