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En México hay una clara relación entre la falta de competencia y la corrupción, sobre todo en las compras de bienes o servicios que lleva a cabo el gobierno, admitió la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece).
Como consecuencia de este fenómeno, la Cofece lanzará la Agenda de Competencia, a fin de lograr un ejercicio íntegro de las contrataciones públicas.
La comisionada presidenta de la institución, Alejandra Palacios, dijo que se incluyen recomendaciones sobre cómo consolidar compras de gobierno, y cuándo sí y cuándo no permitir la subcontratación, entre otros aspectos.
Además de lo anterior, se presentará un sistema de puntos para calificar las propuestas de los proveedores. Así que cuando se trata de licitaciones con sumas relevantes de dinero será conveniente fomentar la competencia por medio de un mecanismo de puntos y porcentajes, sobre los cuales se podrá elegir de manera más transparente al ganador.
Las cifras de la Presidencia muestran que el gobierno mexicano es el principal consumidor de bienes y servicios en el país.
En 2013, las compras del gobierno ascendieron a 365 mil millones de pesos, cantidad que se incrementó anualmente para llegar a los 547 mil millones en 2017, los cuales representaron 208 mil contratos que se otorgaron a través de CompraNet.
Palacios consideró que es necesario hacer más transparentes los procesos y puede pensarse en dejar las adjudicaciones directas y cambiarlas por concursos selectivos, de manera que haya mayor participación y con ello la licitación no se dirige tanto a una sola empresa.
“Las recomendaciones están hechas hacia cómo hacer las bases de licitación para que sean lo más objetivas posible y que participe el mayor número de empresas, para así evitar que haya simulación” en los concursos, dijo.
El problema actual es que en algunos concursos se simula que hay participación de muchos competidores. Parece que son varias empresas las que presentan cotización, pero todas tienen el mismo representante legal y domicilio fiscal, explicó Palacios Prieto.
Aprendizaje. Para la representante de la Comisión Federal de Competencia Económica, el documento que se presenta hoy refleja el aprendizaje del organismo antimonopolios en la materia y las principales problemáticas detectadas, porque “en las compras públicas vemos falta de competencia y eso refleja una relación entre la poca competencia y la corrupción”, comentó.
Podemos estar o ante un círculo vicioso o ante uno virtuoso entre competencia y corrupción con las contrataciones públicas, porque “si el concurso es competido el margen de discrecionalidad es menor, pero si diriges un concurso hay menos competencia y la posibilidad de corrupción es mayor”, dijo.
Alejandra Palacios explicó que hay varios casos de compras de gobierno en los que hubo prácticas anticompetitivas y corrupción, como en guantes de látex, sondas, condones y servicios de información.
En la experiencia de la Cofece, hay funcionarios que hasta pidieron a las empresas no participar en ciertos concursos para simular competencia, pero finalmente la firma ganadora los subcontrató.
