Analistas del sector energético consideraron que la iniciativa de reforma a la Ley de la Industria Eléctrica no sólo viola la Constitución, sino que es un acto discriminatorio en favor de (CFE).

A través de su cuenta de Twitter, César Hernández, ex subsecretario de la Electricidad de la Secretaría de Energía, comentó que la iniciativa implica cambios fundamentales en materia de energías limpias , despacho eléctrico, permisos privados, subastas que “entran en conflicto con la Carta Magna y los tratados comerciales que México ha firmado con otros países como Estados Unidos y Canadá".

También indicó que los artículos transitorios de la iniciativa abren expresamente la puerta a revocar viejos permisos de autoabasto y renegociar contratos de Productores Independientes. Es decir, mencionó, “afectarían derechos adquiridos y expectativas legítimas de inversionistas”.

Víctor Ramírez, analista del sector energético y vocero de la Plataforma México, Clima y Energía, explicó en entrevista con EL UNIVERSAL que, de concretarse la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica , promovida por el jefe del Ejecutivo, “obliga a los ciudadanos a depender del monopolio de la CFE , al no tener oportunidades de bajar los precios ni a tener energías baratas”.

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Además, advirtió que esto podría “encarecer todo”: Cemento, vidrio, pan, tortillas, embotellados, hoteles, automóviles, sin considerar que podría presentarse una fuga de inversiones cerrando miles de empleos y generaría conflictos legales internacionales.

Recordó que, en el caso de los contratos de Productores Independientes , la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) “ya los revisó hace años por una controversia que presentó el director de la CFE, Manuel Bartlett, la cual perdió. "Insisten con un tema juzgado y con consecuencias económicas enormes", sostuvo.

El analista y socio de la firma Caraiva y Asociados-León & Pech Architects, Ramses Pech , coincidió en que los cambios a la Ley de la Industria Eléctrica, propuestos por el presidente Andrés Manuel López Obrador, “podría incrementar los costos de generación en un corto plazo, al despachar con plantas de alto costo. Esto derivado del uso de combustibles más caros en alguna región en particular, afectando el costo en el nodo.

"Esto podrá ser subsanado si CFE cuenta con el dinero de la inversión necesaria para la reconfiguración de las plantas a base de combustóleo o mejorar las actuales de ciclo abierto a cerrado”, explicó.

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Consideró que esta reforma es una mala señal que puede acarrear desinversión por parte de privados ante la falta de certeza, como poder recuperar la inversión y competir con plantas de CFE, con más de 30 años de operación o depreciadas en comparación con centrales que tienen tecnología de última generación.

Asimismo, detalló que la iniciativa se contrapone a lo que dictamina el tratado comercial con Estados Unidos y Canadá ( T-MEC ) en cuanto a la competencia y sobre las regulaciones, debido a que obliga a la Comisión Reguladora de Energía (CRE) a gestionar la cancelación de contratos de autoabastecimiento, en el caso que estos utilicen la red de transmisión y no paguen los derechos, “sería, según esa contrarreforma, forzar a este tipo de generación a pagar lo que corresponde por el uso de la rede de transmisión”.

También obligaría al Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) a emitir dictámenes para nuevas plantas “atados a construir líneas de transmisión para poder hacer la carga al sistema de interconexión nacional. Esto, tendrá una desventaja primordialmente a plantas de generación del tipo renovable”.

Por su parte, Kenneth Smith Ramos , exnegociador del TLCAN en representación de México, mencionó en su cuenta de Twitter que esta reforma es contraria a los compromisos de México con el T-MEC.

Agregó que "atenta en contra de la competencia en el sector eléctrico. Además causaría estragos al medio ambiente".

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