Después de los sismos que afectaron en diversas zonas del país, para emprendedores y pequeñas y medianas empresas (Pymes) el reto es lograr reactivar sus operaciones diarias del negocio, así como tomar medidas preventivas.
Según un análisis elaborado por Konfío , empresa del sector Fintech (tecnología financiera) enfocada en pequeños negocios, la falta de contratación de seguros y las restricciones para obtener créditos pueden presentarse en el proceso de recuperación de este tipo de organizaciones.
Hay una serie de cinco acciones que ayudarán a reactivar las operaciones de una Pyme y no frenar su crecimiento en caso de un desastre natural, asegura Konfío.
1.- Cuantificar daños
Una vez que se pueda ingresar a las instalaciones, es importante que se calcule el impacto que generó el sismo en el negocio. Para ello, deben determinarse los daños que sufrieron las instalaciones, mobiliario y equipo, así como inventario perdido. Es importante hacer un listado de todos los daños, e incluir el impacto económico causado, para saber cuánto dinero se necesita para reactivar operaciones.
2.- Buscar un lugar alterno para trabajar
Si las instalaciones sufrieron algún daño o el negocio se encuentra en una zona afectada, hay que buscar opciones para continuar trabajando sin poner en riesgo al equipo de trabajo. La tecnología puede ser una gran aliada ante este tipo de acontecimientos, es importante evaluar el trabajo a distancia o el uso temporal de espacios de coworking. Si el negocio está enfocado en la venta de productos, no descartar el uso de páginas de venta como Amazon o Mercadolibre, para implementar rápidamente una tienda online y buscar no parar ventas, continuar la operación y ofrecer una nueva opción a los compradores.
3.- Definir prioridades
Es importante identificar las actividades primordiales del negocio y determinar qué recursos se necesitan para continuar con la operación diaria. Existen diferentes apoyos para Pymes que ayudan a obtener los recursos económicos necesarios para reactivar el negocio de forma rápida. Es importante investigar sobre programas públicos que se implementen para apoyar al sector empresarial e identificar alternativas de financiamiento rápido, pero de forma responsable.
4.- Coordinarse con proveedores
La comunicación constante con los proveedores es vital en estos momentos de contingencia. Aunque el negocio no haya sufrido daños mayores, este podría tener pérdidas importantes si no se reciben los productos necesarios en tiempo. Por ello es bueno tener un “plan B” y evaluar a proveedores que puedan sustituir a los actuales en caso de alguna emergencia. Esto al mismo tiempo amplía la gama de posibilidades de dónde obtener los insumos y obtener mejores precios.
5.- Contar con un seguro
Sólo 5% de los pequeños y medianos negocios en México cuentan con un seguro para desastre naturales, como un sismo. Si cuentas con uno, es importante que revises la cobertura que tienes. Con esto, tal vez se puedan cubrir los gastos de infraestructura generados por el sismo y las pérdidas ocasionadas por interrumpir las operaciones. Si no lo tienes, es importante que en tus planes a mediano plazo consideres las ventajas de contratarlo.
afcl