Acapulco, Gro.— Al reconocer al coronavirus (Covid-19) como una pandemia, el Banco de México (Banxico) advirtió que la economía mundial enfrenta un choque sin precedentes y que sus efectos serán especialmente adversos en el corto plazo.
“La pandemia del virus Covid-19 ha impuesto retos significativos para la economía mundial y nacional. La economía mundial enfrenta un choque sin precedentes, sus efectos serán especialmente adversos en el corto plazo y lo estamos viendo”, afirmó el gobernador del instituto central, Alejandro Díaz de León.
Durante su discurso en la inauguración de la 83 Convención Bancaria, alertó que los mercados estarán sensibles a la propagación del virus.
“Claramente los mercados nacionales estarán muy sensibles a la evolución epidemiológica del virus, y éste será un elemento en el que es inusitado el tipo de choque estamos viendo”.
Adicionalmente a este nuevo escenario, ponderó que se han presentado caídas en los precios internacionales del petróleo por la falta de acuerdos entre los principales países productores y posibles incrementos en su oferta “o una guerra por el mercado”.
Díaz de León hizo un recuento de las afectaciones a la actividad económica mundial y nacional, tanto por el lado de la oferta como de la demanda.
En el primer caso, el gobernador del Banxico señaló las interrupciones en las cadenas globales de suministro, especialmente en la producción manufacturera.
En tanto, del lado de la demanda el gasto se verá afectado por las medidas precautorias tanto de los consumidores como de las empresas, impactando la inversión y el consumo, indicó.
Lo anterior tendrá implicaciones en los mercados financieros globales y nacionales en el apetito por riesgo a escala internacional, lo que presionará a los tipos de cambio y tasas de interés de economías emergentes.
Dimensión humana trágica
Alejandro Díaz de León mencionó como segundo canal de afectación del virus hacia las economías que sin duda tendrá una dimensión humana trágica, que confió en que “ojalá pueda revertirse lo antes posible”.
“Hemos visto afectaciones muy significativas en el apetito por riesgo a nivel global; se han presionado de manera significativa los tipos de cambio y las tasas de interés, especialmente en las economías emergentes”, ponderó el funcionario.
En tanto que en economías avanzadas, señaló que se ha visto un reacomodo de portafolio diferente: han tenido una salida de mercados accionarios y más hacia renta fija.
No obstante, Díaz de León aseguró que la fortaleza macroeconómica con la que se cuenta contribuirá a un mejor ajuste de los mercados financieros y de la economía en su conjunto.
En la determinación de la postura de política monetaria, dijo que el Banco de México analizará toda la información disponible respecto a los efectos que la propagación del virus y otros riesgos pueden tener en la economía y los mercados financieros nacionales.
También se analizará el mantenimiento de una inflación baja y estable alrededor de la meta en la siguiente reunión de política monetaria, anticipó el gobernador del banco central.