cartera@eluniversal.com.mx
Con 45 y más de 20 años de servicio en el Banco de México, Roberto del Cueto y Manuel Ramos Francia, respectivamente, cierran un ciclo como subgobernadores.
Ambos vivieron muchos momentos gratos, como la autonomía del instituto central, pero también episodios difíciles, como las devaluaciones. Roberto del Cueto, quien se retira por motivos de salud, y uno de los responsables de redactar la ley que le dio la autonomía al Banxico, recuerda que en 1982 contaron 36 fines de semana trabajando.
Se daban cuenta de que era sábado porque iban a trabajar con ropa sport. “Si volviera a nacer, pediría trabajo en el Banxico”, dice el único abogado de la Junta de Gobierno, aunque probablemente estudiaría Economía, porque “son los que parten el queso” en el banco.
Por eso, recomienda cuidar la autonomía: “Cuando veamos cualquier intento por vulnerarla, actuemos para tratar de evitarlo, porque lo que tratarían de quitarnos es una garantía individual, un derecho que tenemos ganado los mexicanos”.
Considera que un subgobernador, independientemente de quién lo haya designado y de sus inclinaciones políticas, tiene que acatar la Ley de Banxico.
Ramos Francia, quien acaba su periodo el 30 de diciembre, a nivel personal se da tiempo para reflexionar sobre lo que representó trabajar en Banxico. Con la voz entrecortada, dice que ha sido “un gran honor estar en esta institución… Es difícil resaltar los momentos, porque como economista es un honor”.
Por eso, para él los mejores momentos fueron los más complicados, porque se comprueba el respeto que se le tiene al Banxico cuando toma decisiones difíciles, tributo que se da como efecto de la autonomía y el diseño institucional.
Considera que uno de esos momentos cruciales es cuando la economía ha estado sujeta a choques y hay repercusiones sobre el bienestar de la población. Públicamente no tiene empacho en resaltar el sello que le está dando el gobernador, Alejandro Díaz de León, con su trabajo por preservar el buen funcionamiento del sistema de pagos y el financiero, con las consultas públicas para el diseño de la regulación financiera.
“Es algo que me ha hecho muy optimista”, afirma. Además, recomienda seguir exigiendo transparencia y rendición de cuentas.
También señala que el siguiente paso en su vida es la academia y evalúa propuestas en ese sentido.
Del Cueto y Ramos Francia se retiran con pensión del Banco de México; el primero ya la tenía, pero la interrumpió 12 años, cuando comenzó a ser subgobernador.