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Monterrey, N.L.— La volatilidad del tipo de cambio está entre los principales retos que enfrentan los productores, procesadores y comercializadores de carne y leche, dijo Carla Suárez Flores, presidenta del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne). Otros desafíos son el incremento en los costos energéticos, así como un consumidor cada vez más exigente, destacó en entrevista con EL UNIVERSAL.
“Definitivamente el tema de la volatilidad del tipo de cambio es algo importante, ya que muchos de nuestros insumos están dolarizados”.
Suárez Flores fue reelecta ayer por tercera ocasión consecutiva para seguir encabezando el consejo durante Expo Carnes y Lácteos 2019.
El anterior fue un buen año para la industria de la carne en el país, pues el consumo creció 3.5% en todas las carnes y para 2019 se espera mantener el incremento por lo menos a la misma tasa de la población, dado que las expectativas de crecimiento económico general son bajas, explicó.
“Nuestra proteína es muy noble porque llegamos a todos los segmentos de la pirámide económica, eso nos permite ofrecer productos indispensables para la dieta del consumidor”, dijo Suárez Flores.
“Rabobank (entidad financiera holandesa con un gran peso en el sector alimentario global) presentó un estimado que por cada peso que se incremente el ingreso del decil más pobre en México, 37 centavos lo destinan a la compra de carne”.
Además, si se consideran los apoyos económicos a segmentos vulnerables de la población a través de programas del gobierno, seguramente se van a destinar al consumo de carne, y esto da pauta al sector cárnico para seguir creciendo.
Suárez Flores explicó que posicionar positivamente a la proteína es un gran reto para la industria, desde hace varios años. Agregó que se ha hecho un gran trabajo para transmitir al consumidor información relevante, científica, sustentada, para que incorpore cada vez más la proteína a su dieta.
Otro gran reto es alcanzar una mayor competitividad en los productos de la industria de la carne, y poder tener precios accesibles que lleguen a todos los segmentos económicos de la pirámide poblacional.
“Es sólo a través de la tecnología, a través de innovaciones en ingredientes, empaques, equipos, etcétera, que podemos tener también proteína más accesible”, explicó.
Con relación al Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), expresó que el sector de la carne está tranquilo, en la medida no hay nada que cambie de manera coyuntural respecto a lo que se tenía desde el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
“Esperamos seguir teniendo los insumos competitivos y toda la interacción comercial que ya teníamos con nuestros aliados estratégicos del norte”, dijo al respecto.
Sobre la relación con el nuevo gobierno, Suárez Flores comentó que se han tenido reuniones con aquellas dependencias con las que el sector tiene más interacción, como son las secretarías de Agricultura y Desarrollo Rural, y de Economía, pero está pendiente el acercamiento con la Secretaría de Salud.
Sin embargo, consideró que las autoridades conocen bien a la industria, así como los problemas y necesidades que tiene. “Coincidimos en las estrategias que ellos nos han planteado y que nosotros estamos desarrollando”, precisó.