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Los migrantes enviaron a México el mayor flujo de remesas en la historia por el Día de las Madres, recursos determinantes en la reducción de la pobreza y desigualdad.
Cifras del Banco de México (Banxico) publicadas ayer señalan que el país captó por remesas 3 mil 203 millones de dólares, alrededor de 61 mil 240 millones de pesos, durante mayo del presente año.
Se trata de la mayor cantidad de dólares, en sólo un mes, desde que se mide el dato, a partir de 1980.
El 95% de recursos provinieron de Estados Unidos, donde la población de origen mexicano suma 38 millones de personas, que incluye a connacionales y a descendientes de segunda y tercera generación.
En promedio, cada migrante envió 322 dólares en mayo, equivalente a 6 mil 157 pesos, monto que cubre el costo mensual de la canasta alimentaria y no alimentaria para tres personas de zonas rurales del país o bien, para dos individuos que habiten en áreas urbanas, de acuerdo con la Línea de Pobreza por Ingresos del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Analistas relacionan el mayor flujo de remesas en mayo con el Día de las Madres, celebración que motiva a los migrantes a mandar más dinero para su mamá y en el caso de los hombres, envían más para la mujer que dio vida a sus hijos.
Michoacán es la entidad que más remesas recibe, al concentrar uno de cada 10 dólares que ingresan, seguido de Jalisco, Guanajuato, Estado de México y Oaxaca.
La Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2016 del Inegi señala que tres de cada cuatro familias receptoras de remesas perciben ingresos totales de menos de 10 mil pesos mensuales.
Para Juan Carlos Alderete, economista senior de Banorte, las remesas acumuladas en el año seguirán siendo un soporte para los fundamentales del consumo en México, que recientemente han mostrado señales de moderación.
Sin embargo, destaca que el flujo de remesas crece más lento que antes y lo relaciona con la desaceleración de la actividad económica en Estados Unidos, pues repercute en el empleo de los migrantes.
“La retórica antimigratoria en la Unión Americana, que escaló recientemente ante la amenaza de imponer tarifas a todas las exportaciones mexicanas debido al aumento en el flujo de personas hacia ese país, está cambiando gradualmente la dinámica del flujo de remesas”, agregó en un reporte.
Las remesas representan la segunda principal fuente neta de divisas para el país, sólo después de las exportaciones automotrices.
México es el cuarto país que más remesas reciben, sólo por detrás de India, China y Filipinas, de acuerdo con cifras del Banco Mundial.