Pese a la importante recuperación del empleo en México durante 2021, hay 15.2 millones de trabajadores cuya fuerza laboral es desaprovechada, por encontrarse desempleados, subocupados o sin buscar trabajo por considerar que no hay oportunidades, arrojó la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo publicada por el Inegi.
Para tener una idea de su magnitud, ese dato equivale a desaprovechar la fuerza laboral del Estado de México, Ciudad de México y Michoacán en conjunto, o toda la población sumada de Honduras y Costa Rica.
Si bien el porcentaje de trabajadores subutilizados con relación a la población económicamente activa potencial disminuyó, al pasar de 29.4% en diciembre de 2020 a 22.9% en diciembre de 2021, todavía se encuentra 4.7 puntos porcentuales (3.6 millones de personas) por arriba de la tasa existente al cierre de 2019, previo a la pandemia.
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En opinión de José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (Idic), lo anterior tiene que ver con una expresión de la precarización del mercado laboral, que básicamente corresponde a que las condiciones de empleabilidad y de desocupación se han erosionado en el país.
A causa de la crisis generada por la pandemia de Covid-19, dijo que “la economía mexicana no tiene la capacidad productiva ni las inversiones necesarias para dar cabida a toda la población que está en posibilidades y disposición de trabajar, pero que no encuentra una fuente laboral que le sea estable, con las condiciones salariales y las prestaciones suficientes para cubrir sus necesidades”.
Desaprovechar esta fuerza laboral implicaría, en parte, la pérdida de al menos un punto porcentual del Producto Interno Bruto (PIB) del país, toda vez que el crecimiento de la actividad económica nacional estimada en los últimos meses del año pasado se ubicó muy por debajo de su potencial en alrededor de 2.3%, estimó el directivo, quien también es el presidente de la Comisión de Estudios Económicos de la Concamin.
Fuerza sin utilizar
Uno de los principales componentes de este grupo cuya fuerza de trabajo es desaprovechada es la población no económicamente activa que se declaró disponible para trabajar, pero no llevó a cabo acciones para hacerlo, debido principalmente por considerar que no existen oportunidades laborales.
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Este segmento sumó 7.5 millones de personas al cierre del año pasado, lo que significó una disminución de 1.8 millones con relación al dato de diciembre de un año antes, pero se mantiene 1.5 millones por arriba del nivel reportado durante el último mes de 2019.
El siguiente segmento desaprovechado de la fuerza laboral es la población subocupada, medida como aquella que declaró tener la necesidad y la disponibilidad para trabajar más horas de lo que su ocupación actual
les demanda.
Ese grupo llegó a 5.7 millones de personas al cierre del año pasado, una cantidad inferior en 1.7 millones contra la del mismo mes de 2020, pero todavía 1.5 millones por arriba del dato de diciembre de 2019.
En consecuencia, la tasa de subocupación fue de 10% de la población ocupada, porcentaje menor al nivel de 14.1% registrado un año antes, pero mayor a la tasa de 7% reportada antes de la emergencia sanitaria.
