Los principales motores de la economía: la inversión física y el consumo privado tuvieron diferentes comportamientos durante julio pasado, mientras el primero desaceleró su marcha, el segundo se estancó, revelan los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
La Inversión Fija Bruta, que comprende el gasto en maquinaria y equipo, así como en construcción logró un incremento mensual de 0.5% en julio pasado, tasa inferior al 3.3% reportado un mes antes, pero alcanza a ligar 12 meses al alza.
Este crecimiento se debió al favorable comportamiento de la inversión en construcción que registró un alza mensual de 1.9%. Mientras la residencial avanzó 1.2%, la no residencial alcanzó un crecimiento de 2.2%.
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Lo anterior es resultado del impulso que ha cobrado la obra pública con sus proyectos, así como los del sector privado, impulsados por el proceso de relocalización de empresas globales, el llamado nearshoring.
Por su parte, la inversión en maquinaria y equipo reportó un retroceso mensual de 0.9% en julio, con lo que frena el avance observado en los tres meses anteriores. A su interior la compra de material de origen nacional registró un crecimiento de 5.4%, en tanto que el importado retrocedió 3.7%.
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Por su parte, el otro impulsor de la economía, el Consumo Privado en el Mercado Interior no reportó una variación significativa durante el sétimo mes del año, luego de un crecimiento de 0.4% observado un mes antes.
El consumo de bienes y servicios nacionales avanzó 0.3%, luego de dos meses a la baja debido a la prevalencia todavía de altos niveles de inflación en el país.
A su interior, el consumo de bienes aumentó 1.4%, mientras que la demanda de servicios observó una baja de 0.6% tras el aumento de 0.1% observado en junio.
Por su parte, el consumo de bienes importados registró una disminución de 1.1% durante julio debido en parte a la volatilidad del tipo de cambio, con lo que frena el alza observada en los cuatro meses anteriores.
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vcr/mcc