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Desde que inició la administración de Andrés Manuel López Obrador, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) denunció ante la PGR a siete empleados de las aduanas por diversos delitos de corrupción.
“Hay tres que están vinculados a proceso y el juez determinará su situación jurídica; el resto está en carpeta de investigación”, informó el administrador General de Aduanas (AGA), Ricardo Peralta Saucedo.
En entrevista, dijo que si bien no es una “purga” al interior de la AGA, se hará una revisión exhaustiva de los perfiles de los trabajadores para el tema del control de confianza.
Empezarán por analizar la evolución patrimonial de todos los servidores públicos que participen en las aduanas, informó.
Lo anterior, derivado del programa Fuerza Anticorrupción, que arrancó con la nueva administración en Aduanas, señaló.
Comentó que un caso se dio en la aduana de Reynosa, en donde un empleado desleal de la AGA sustituyó un pedimento aduanal en el que se declaraba que la mercancía era material electrónico y en realidad eran mil 400 cargadores de cuernos de chivo.
“Hoy el señor está vinculado a proceso; no vamos a parar en un simple procedimiento administrativo ante la Secretaría de la Función Pública, vamos hasta las últimas consecuencias”, advirtió.
Combate al huachicol. Del programa para el ágil traslado de hidrocarburos, informó que con información al 21 de enero pasaron por las aduanas más de 2 mil pipas que pidieron solicitud de importación.
Eso representa para el gobierno federal un poco más de 13 mil millones de pesos en pago de IVA por importación. Dijo que las aduanas de las fronteras siguen trabajando 24 por siete para la distribución de combustibles.
Ricardo Peralta aseguró que todavía no han ingresado las nuevas pipas que compró el gobierno.
Además, adelantó que iniciarán operativos masivos sorpresa, junto con la Defensa Nacional, la Secretaría de Marina y la Policía Federal, en vuelos de avión de Centro y Sudamérica, que es en donde se ha detectado sustancias ilícitas.
Convenio de Kyoto. El funcionario destacó que en los últimos dos años las aduanas recaudaron en promedio 845 mil millones de pesos, es decir, una aportación de 60% del Producto Interno Bruto (PIB).
Lo anterior, sin contar los ingresos que se cobran por medio del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
En el caso de la aduana de cargo del aeropuerto de la Ciudad de México, señaló que es la segunda más importante después de la ubicada en Nuevo Laredo, que opera las 24 horas del día.
Pero México no forma parte de las 10 principales aduanas del mundo, porque ocupa el lugar 53 de un total de 135, a pesar de que la operación
es enorme.
Explicó que la ausencia en los primeros lugares se debe a que México no forma parte del Convenio de Kyoto que obliga a la tecnificación y a la transparencia.
Como ejemplo, indicó que México no cuenta con tecnología como el body scan para las revisiones no intrusivas, como lo tienen todos los aeropuertos del mundo.
Por eso, anunció que como parte de los primeros 100 días del nuevo gobierno, México buscará adherirse al Convenio de Kyoto.