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La discusión del dictamen en materia de subcontratación (outsourcing) en la Cámara de Diputados reducirá la incertidumbre generada en torno a cómo las empresas podrán hacer cambios en sus plantillas laborales y modelos de negocios, consideró ManpowerGroup.
Si bien hasta el momento se desconoce el texto que será discutido en el Congreso de la Unión, la discusión por sí misma puede dar a las organizaciones en el país un punto de partida sobre cómo adecuarse a las nuevas disposiciones de la Ley Federal del Trabajo, dijo la empresa mundial especializada en outsourcing.
“Estamos en un contexto de incertidumbre y esto detiene decisiones de las organizaciones, lo que impacta en la generación de empleos, respecto
a mantener, aumentar o disminuir su plantilla laboral, cómo mudarse de un esquema de contratación a otro y buscar otros modelos de negocios y áreas de inversión”, explicó Mónica Flores, presidenta de ManpowerGroup para Latinoamérica.
De acuerdo con un análisis de la empresa, se estima que 460 mil empleos se pueden perder directamente si se recurre a la prohibición del outsourcing.
Asimismo, 2 millones 760 mil más pasarían a esquemas sin seguridad social y sólo un millón 380 mil podrían ser absorbidos como empleados de base por las empresas, considerando 4 millones 600 mil empleos subcontratados que existen en el país, de acuerdo con los datos del Inegi, y poniéndolos en relación con las probables intenciones de contratación de las empresas.
La subcontratación en México es perfectible, dijo Flores. Regular, hacer que se cumpla la ley y acabar con las malas prácticas es una vía preferente a sobrerregular y prohibir el outsourcing, ya que esto impactaría el panorama del empleo formal.
“El mundo va hacia la flexibilización laboral donde todos queremos fomentar empleo para recuperar lo perdido por la pandemia. Una ley restrictiva y prohibitiva va a poner barreras a la contratación y no generará confianza a la inversión”, destacó la directiva.
Ante la pandemia de Covid-19 se necesitan medidas que reactiven la economía, mientras que el territorio para la evasión y elusión fiscal por medio de la subcontratación ilegal debe regularse para transformarlo en empleo formal, tanto permanente como temporal, dijo.
“La forma de crear empleo formal es atraer inversión nacional y extranjera, generar confianza y facilitar la contratación de personas. La confianza no depende sólo de una nueva legislación, sino también de que se aplique, se vigile y se haga cumplir la ley”, señaló Flores.
Con la prohibición de la subcontratación se puede agravar el problema de la informalidad, alertó, ya que es el único sector con la capacidad de absorber
a las personas que no puedan ser contratadas directamente por las empresas y darles una vía de sustento.
