Los riesgos que más preocupan a los líderes del mundo para 2022 tienen que ver con cambios extremos en la temperatura, la erosión en la cohesión de la sociedad y el deterioro de la salud mental que deja como cicatriz la pandemia de Covid-19, dijo el World Economic Forum (WEF, por sus siglas en inglés).
De acuerdo con el Informe de Riesgos Globales 2022 del organismo, se advierte una inminente crisis de deuda como amenaza para los dos años próximos, derivada del endeudamiento de los países por impulsar estímulos fiscales para las empresas y población en medio de la emergencia sanitaria.
Otros peligro tiene que ver con la desigual conectividad digital, que deja fuera a 3 mil millones de personas del mundo que no podrán incorporarse al trabajo remoto y a las nuevas formas de interacción.
Tampoco se debe olvidar que en materia geoeconómica existe el riesgo de confrontaciones, lo que surge como una amenaza crítica para el mundo a mediano y largo plazo.
La directora gerente del Foro Económico Mundial (WEF), Saadia Zahidi, afirmó que los desajustes económicos y sanitarios están agravando las divisiones sociales.
“Esto crea tensiones en un momento en el que la colaboración dentro de las sociedades y entre la comunidad internacional será fundamental para garantizar una recuperación mundial más rápida y uniforme”, destacó.
El informe destaca que el fracaso climático y la crisis social son los principales riesgos globales de 2022, así como los riesgos cibernéticos, la recuperación global desigual y la persistente pandemia.
Como resultado de las encuestas, el WEF encontró que los peores riesgos ligados a la pandemia son la erosión de la cohesión social, crisis social, fallas en las acciones para frenar el cambio climático, deterioro de la salud mental, temperaturas extremas, crisis de deuda, fallas cibernéticas, enfermedades infecciosas, desigualdad digital, rechazo a la ciencia, pérdida de biodiversidad y confrontaciones geoeconómicas.
En el corto plazo, es decir, de ahora a dos años, los riesgos globales con mayor posibilidad de que ocurran, según los líderes, son temperatura extrema, crisis, fallas en las acciones contra el cambio climático, erosión de la cohesión social, enfermedades infecciosas, deterioro mental, fallas en la ciberseguridad, crisis de deuda, desigualdad digital y estallido de la burbuja de activos.
Los riesgos que se observan para el mediano plazo, es decir de dos a cinco años, son crisis climática, temperaturas extremas, erosión de la cohesión social, crisis social, crisis de deuda, daños al entorno humano, confrontación geoeconómica, fallas en la ciberseguridad, pérdida de la biodiversidad y estallamiento de burbuja de valores.
Para el largo plazo, en un escenario de cinco a diez años, los riesgos que se observan son el cambio climático, temperaturas extremas, pérdida de biodiversidad, crisis de recursos naturales, daños al entorno humano, erosión de la cohesión social, migración involuntaria, avances adversos de la tecnología, confrontaciones geoeconómicas, confrontaciones geopolíticas.
Además, el WEF dio a conocer que el Top 10 de los riesgos globales por severidad está integrado por los siguientes factores: cambio climático, temperaturas extremas, pérdida de biodiversidad, erosión de la cohesión social, crisis social, enfermedades infecciosas, daños al entorno humano, crisis de recursos naturales, crisis de deuda y confrontación geoeconómica.
Al respecto, la líder de manejo de riesgos para el continente europeo de Marsh, Carolina Klint, dijo que “a medida que las empresas se recuperan de la pandemia, se centran acertadamente en la resiliencia organizacional. Está claro que ni la resiliencia ni la gobernanza son posibles sin planes creíbles y sofisticados de gestión del riesgo cibernético”.
“Del mismo modo, las organizaciones deben empezar a comprender sus riesgos espaciales, en particular el riesgo que corren los satélites, de los que nos hemos vuelto cada vez más dependientes, dado el aumento de las ambiciones y tensiones geopolíticas”, afirmó la especialista de la firma global de servicios progesionales.