La banca privada metió el acelerador en los préstamos para adquirir automóviles, de acuerdo con la información más reciente del Banco de México (Banxico).
El saldo del financiamiento automotriz llegó a 251 mil millones de pesos en abril de este año, 43.5% más que en el mismo mes de 2023 al restar la inflación.
Se trata del mayor incremento desde que hay datos comparables en el banco central, cuya serie arranca hace más de 12 años, a partir de febrero de 2012.
El crédito automotriz también lleva 11 meses consecutivos expandiéndose a tasas superiores a 10%.
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Analistas de Banorte explicaron que el motor que está detrás de este desempeño es la alta demanda por automóviles y destacaron la fortaleza del empleo, así como otros aspectos fundamentales del consumo.
De enero a abril, 59.1% de las adquisiciones de vehículos nuevos ligeros se concretó mediante el crédito de un banco o una financiera de marca ligada a las armadoras, por encima de la tasa de 55.7% que se reportó en el mismo periodo de 2023, señalan cifras de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA).
En general, el financiamiento bancario continuará marchando a buen ritmo a pesar de algunos vientos en contra en el horizonte, estimaron en Banorte.
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