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El crecimiento de la economía durante el tercer trimestre de 2018 fue ligeramente inferior a las cifras preliminares, debido principalmente al menor dinamismo del sector agropecuario.
Pese a ello, el resultado continuó siendo positivo luego del estancamiento reportado en el segundo trimestre del año, informó el Inegi.
De igual forma, a tasa anual el incremento fue de 2.6%, tasa menor al 2.7% previsto anteriormente.
Por componentes, el sector primario relacionado con las actividades agropecuarias reportó un aumento en el tercer trimestre de 0.4%, cifra menor al 0.8% estimado.
La actividad industrial registró un crecimiento trimestral de 0.5%, en línea con lo previsto inicialmente, con lo que la variación anual se ubicó en 1.2%, cifra ligeramente superior a lo estimado de manera preliminar. Destaca el avance de la manufactura, la cual se incrementó trimestral de 0.9%, presentando una ligera aceleración en comparación con el trimestre previo, y registrando su mayor expansión desde el primer trimestre de 2017.
Por su parte, la construcción moderó su tasa de contracción, al pasar de 1.8% a 0.1%.
El sector terciario relacionado con el comercio, transporte y otros servicios presentó una mayor tasa de expansión, al crecer 0.8% en el tercer trimestre contra 0.3% del trimestre anterior. Pese a lo anterior, destaca la fuerte contracción en las actividades gubernamentales, las cuales cayeron 2.2% después de mantenerse en terreno expansivo en los últimos cuatro trimestres. Estas disminuciones son consistentes con la expectativa de una caída del gasto gubernamental después del periodo electoral que finalizó el 1 de julio.
Por otra parte, el Inegi informó que el Indicador Global de la Actividad Económica (una especie de PIB mensual) creció 0.4% en términos reales en septiembre de este año respecto al mes previo, con cifras desestacionalizadas, luego de que durante agosto se había estancado.
Hacia adelante, la actividad productiva del país en el cuarto trimestre del año presentaría una moderación en comparación con el tercer trimestre, como consecuencia de la eliminación de un efecto de base positivo tras los desastres naturales que ocurrieron en el tercer trimestre de 2017, explicó Francisco Flores, analista económico de Grupo Financiero Banorte.
Para el próximo año, se prevé un menor ritmo para la actividad económica nacional por factores como la moderación en el crecimiento en Estados Unidos, ante el desvanecimiento de los efectos de la reforma fiscal; la lenta ejecución del gasto gubernamental derivado del cambio de gobierno, y las menores tasas de expansión del consumo privado interno, estimó Alejandro Saldaña, analista económico de Grupo Financiero Ve por Más.