La emergencia sanitaria que generó la pandemia por el Covid-19 y el confinamiento social generaron una crisis económica con un impacto negativo para el empleo diez que es diez veces mayor a lo visto en los primeros meses de la crisis global de 2008, dijo la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Dijo que para el próximo año y medio hay dos escenarios, siendo el primero que los contagios se mantengan bajo control, lo que llevará a un incremento de la tasa de desempleo desde el 5.3% al cierre de 2019 a 9.4% para fines de 2020.
En el segundo caso se prevé que surja una segunda ola de contagios en la segunda mitad de 2020, con lo que la tasa de desempleo podría llegar a 12.6%, es decir 7.3 puntos porcentuales más contra el cierre del año pasado.
La recuperación será gradual, ya que 2021 podría concluir con un nivel de desempleo de 7.7% si es que no hay un rebrote, pero de haberlo la tasa apenas bajará a 8.9%.
El Panorama del Empleo 2020 que elaboró la OCDE muestra que en 2008 el impacto que tuvo la crisis económica en el número de horas laboradas fue de una caída de 1.2%, pero con el Covid-19 el retroceso fue de 12.2%, ello a consecuencia de que ya hay 10 millones de casos confirmados y más de medio millón de muertes.
“Esto refleja la naturaleza especial de la crisis del Covid-19 en muchos países que tuvieron que poner a sectores enteros de la economía en pausa a fin de contener el contagio del virus”, dijo la OCDE.
La decisión de frenar la economía provocó en algunos países un salto fuerte de las tasas de desempleo, las cuales llegaron a niveles récord, mientras que en otras solo se incrementó modestamente, lo que refleja las diferentes respuestas que dieron los gobiernos a esta situación.
En el caso de México se espera una caída del PIB de 7.5% para 2020 en un escenario de control de los contagios, pero puede llegar a 8.6% si hay un segundo brote.
En el caso del empleo, la generación caerá entre 0.7 y un punto porcentual en 2020, anticipa el organismo multilateral.
La OCDE afirmó que hay países en donde el desempleo no impactó tanto por los apoyos del gobierno a los trabajadores.
Hubo cuatro tipos de apoyos registrados: transferencias universales; transferencias en efectivo para grupos específicos, apoyos adicionales a las familias para sus gastos y extensión de programas públicos.
En México solamente se dio un apoyo, a través de transferencias directas a hogares.