cartera@eluniversal.com.mx
El secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP), Carlos Urzúa, culpó a la corrupción en México de los bajos niveles de inversión y crecimiento, y afirmó que los servicios públicos de salud “son extremadamente malos”.
“El efecto multiplicador de las inversiones en el caso de México, es mucho más bajo que en la mayoría de los países de América Latina, porque hay corrupción y mala planeación y otros elementos”, dijo al participar en la mesa de discusión Lograr que el crecimiento beneficie a los pobres, organizado por el Banco Mundial (BM).
En el arranque de las Reuniones de Primavera del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, destacó que ante ello, el nuevo gobierno está tratando de combatir la corrupción de una manera muy decidida.
Urzúa explicó que, en parte, la razón del débil crecimiento de la economía mexicana es que en la última década la inversión pública tiene una tasa muy baja respecto a los niveles internacionales, de 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB).
Como ejemplo, dijo que la anterior administración echó a andar el proyecto del tren para conectar al Estado de México con Ciudad de México.
Señaló que el costo de ese sistema ferroviario estaba calculado inicialmente en 29 mil millones de pesos, y se gastaron el doble de esta suma.
“Calculamos que necesitaremos otros 29 mil millones de pesos para terminar con el sistema ferroviario. Además, estaba mal proyectado, porque no pasa por el aeropuerto de Toluca, o sea que necesitaríamos más inversión para conectar a Toluca con el estado”, acusó.
Aprovechó para hablar del proyecto del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Tenemos pensado que un sistema de transporte que una los puertos del Atlántico y el Pacífico Veracruz y Coatzacoalcos, ya existen carreteras y ferrovías y ese proyecto aprovechará o atraerá mucha inversión”, dijo.
Al referirse a los servicios de salud en México, indicó que existen niveles dispares entre una entidad y otra.
“En México, si los servicios de educación no son muy buenos, los servicios de salud son todavía peores, son extremadamente malos, y eso tenemos que arreglarlo”, ponderó.
Confesó que además de estar afiliado al servicio de seguridad social, tiene un seguro de gastos médicos.
“Tengo un seguro médico público y privado, y el hecho de que esté en los dos, puede ayudarle al sistema de salud, porque a veces utilizo mi seguro privado en vez de recurrir al servicio de los hospitales públicos”.