El valor de la producción de las empresas constructoras en México se disparó 38.2% en octubre y lleva 14 meses de avances consecutivos, revelan datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Se trata de su racha positiva más larga desde finales de 2011, cuando acumuló 17 meses en verde.
Con este resultado, el indicador se mantiene 19.7% por arriba del valor registrado previamente a la pandemia, pero todavía está 12.2% por debajo de su máximo histórico alcanzado en diciembre de 2006.
En octubre pasado, el valor de la construcción estuvo explicado en 54.3% por el sector privado y 45.7% por el público.
El sector privado ha mantenido un dominio significativo, llegando a alcanzar niveles cercanos a 70%, hicieron ver los analistas del grupo financiero Base.
En el año, el sector de la construcción ha sido uno de los elementos de mayor dinamismo al ser responsable de casi una tercera parte de todo el crecimiento económico que se ha generado en el país en lo que va de 2023, que a todas luces resulta inusual, debido a que el protagonismo suele ser ocupado por sectores como las manufacturas o el comercio, comentó Daniel Arias, analista económico de grupo financiero Monex.
Por tipo de obra, cinco de los seis grupos que comprenden las empresas del sector reportaron un crecimiento en el valor de su producción durante octubre. El segmento relacionado con transporte y urbanización observó el mayor avance con un incremento de 139.8%; seguido de electricidad y telecomunicaciones, cuyo crecimiento fue 124.4%. Continuó el agua, riego y saneamiento, con un aumento de 31%.
Por subsector, las obras de ingeniería civil explicaron 19% del valor de la producción en el mes, seguido de la edificación, con 65.1% y trabajos especializados para la construcción, con 15.8%.
“En México lo que nos había mantenido fuertes eran las manufacturas, pero en los últimos meses se vienen ralentizando. Ahora lo que ha venido jalando para arriba es el tema de la construcción, que se ha constituido en el gran motor de la actividad industrial, despegando en Campeche, Quintana Roo y Oaxaca por razón de las megaobras”, comentó el mes pasado Sofía Ramírez, directora del grupo de analistas de México, ¿cómo vamos?
Desde su punto de vista, es necesario que la obra pública se diversifique en otras entidades para que contribuya al desarrollo de estados como Chiapas, Michoacán y ahora Guerrero, que se ha visto afectado por el huracán Otis.
En tanto, analistas de Banorte estiman que el dinamismo en la construcción continuará gracias a la obra pública y el nearshoring.
Sobre los proyectos del gobierno federal, el secretario de Comunicaciones y Transportes, Jorge Nuño Lara, informó recientemente que se entregarán al menos 50 obras relevantes actualmente en marcha antes de que termine este sexenio. Entre ellas se encuentran el Tren Maya y aquellas relacionadas con el Corredor Transístmico.
En el sector privado, Nafin y Bancomext anunciaron hace unas semanas que ampliarán su cartera de productos para impulsar al sector inmobiliario industrial, con el fin de aprovechar la ola del nearshoring. Sobre esto último, el gobierno federal también anunció estímulos fiscales a partir del próximo año para 10 sectores estratégicos.