Ante la parálisis que la pandemia del coronavirus ocasionó en el sector de la construcción, las empresas de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) piden ser consideradas para participar en los proyectos de infraestructura del gobierno.

“Los constructores hemos sido desplazados en muchos de los programas del actual gobierno, por políticas no hemos coincidido, que le hemos pedido al gobierno que reconsidere y no lo han hecho.

“Seguiremos pidiéndolo porque creemos que es la forma en que podemos enfrentar el decrecimiento”, dijo Eduardo Ramírez Leal , presidente de la CMIC.

En entrevista, Ramírez Leal comentó que en la construcción del Aeropuerto Internacional de Santa Lucía hay una gran oportunidad de emplear a trabajadores de constructoras formales que pagan impuestos.

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En el Tren Maya ya hay licitaciones en puerta y en los primeros tramos hay empresas mexicanas trabajando, pero falta integrar a constructoras más pequeñas y medianas sin ser subcontratistas.

Pero las constructoras han sido desplazadas de la edificación de los bancos del bienestar y caminos comunitarios, donde se les dio preferencia a las empresas informales.

“La Ley de Obra Pública indica que se tienen que ejercer transparentemente y de manera eficaz los recursos, y antes de señalar que no lo están haciendo, deberían ser a través de licitaciones públicas para que (las obras) no se concentren en algunos”, explicó.

Ramírez Leal dijo que las constructoras han sido estigmatizadas debido a que algunas empresas nacionales y extranjeras abusaron en sexenios pasados, por lo que dejaron hospitales y carreteras a medias, o como en el Tren México-Toluca donde no alcanzaron los recursos y cambiaron las condiciones de costo.

“Pedimos que se haga transparente si alguien no cumplió”, dijo Ramírez.

Actualmente, en siete estados, están completamente paralizadas las actividades de construcción. Por lo tanto, hay 2 mil empresas detenidas, las cuales van a tener problemas para pagarle a sus trabajadores en las próximas semanas, pues no están bien capitalizadas. Hacia finales de abril, se podrían perder 500 mil empleos.

Sobre las medidas que anunció el Banco de México para facilitar el crédito, el presidente de la CMIC comentó que la medida es positiva, pero necesitan que sean más ágiles para que lleguen lo más rápido posible a la banca.

“No hay productos financieros y los que se ofrecen están limitados para empresas grandes”, indicó Ramírez Leal. La CMIC agrupa a 12 mil empresas constructoras.

cev

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