Los funerales son ceremonias que la humanidad ha practicado por mucho tiempo. Estos rituales lúgubres han adquirido diferentes significados de acuerdo con las prácticas culturales que surgieron a lo largo de la historia.
En el mundo occidental de la actualidad la forma más común de conmemorar a los muertos es a través ritos como la cremación y el entierro , ceremonias que se heredaron de la cultura oriental, que fue la primera en realizar funerales similares a los que conocemos.
Actualmente, lo más común es que se rinda homenaje a la vida de una persona incluyendo sus restos en una lápida con un epitafio grabado que describe cómo fue hasta su último día. Sin embargo, hay casos registrados que han llevado los funerales y la construcción de santuarios en los que reposan figuras que pasaron a la historia.
El más destacado es el Taj Mahal , una de las siete maravillas modernas del mundo. Este mausoleo fue construido en 1632 por el emperador Shah Jahan para sepultar los restos de su amada Mumtaz Mahal, quien falleció en el parto de su decimocuarto hijo.
Del Taj Mahal Foto. Pixabay
William Shakespeare
, probablemente el máximo referente de la literatura renacentista y universal, falleció en 1616. Su tumba se encuentra en la Iglesia de la Santísima Trinidad de Stratford-upon-Avon, Inglaterra y se cree que su epitafio fue escrito por él mismo.
La dinastía Qing en China tardó 150 años en construir una serie de tumbas en la provincia de Hebei con una superficie de 2 mil 500 metros cuadrados. Ahí reposan los cuerpos de cinco emperadores y 15 emperatrices del siglo 17 al siglo 20.
El arqueólogo y egiptólogo Howard Carter descubrió durante una expedición en el Valle de los Reyes en 1922 la tumba de Tutankamón , el último faraón de la dinastía 18, quien murió a los 20 años de edad. Su tumba tuvo un proceso de restauración concluido a principios de 2019.
La muerte del escritor Edgar Allan Poe en 1849 continúa siendo un misterio. El autor del famoso poema El Cuervo y de cuentos de terror que siguen leyéndose, yace en una lápida custodiada por esta ave en el cementerio Westminster Hall and Burying Ground en la ciudad de Baltimore, donde acabó sus días en un estado delirante.
Edgar Allan Poe. Foto. Pixabay
Los restos del dictador Francisco Franco fueron exhumados el pasado 24 de octubre de la Basílica del Valle de los Caídos -que él mismo hizo construir, proceso que demoró 18 años- tras permanecer ahí a lo largo de 44 años. El caso del militar que fue uno de los encargados de desatar la Guerra Civil en España en 1936 destaca porque junto a sus restos descansaban 33 mil más, víctimas de la dictadura, de los cuales 12 mil aún no han sido identificados.
vcr