La percepción de las familias sobre su situación económica y la del país continuó deteriorándose en mayo pasado, luego del desplome histórico registrado en abril derivado de la emergencia sanitaria que generó el coronavirus, muestran datos del Inegi.
El Indicador de Confianza del Consumidor registró un balance de 31.1 puntos, lo que representa 1.1 unidades menor al dato de abril y 13.2 inferior al registrado un año antes, para ubicarse en el segundo nivel más bajo desde 2001, cuando inició su registro.
“Si bien la relación entre la confianza y los indicadores de la actividad real no es del todo estrecha, la interacción suele incrementarse en momentos de cambios de coyuntura como en las crisis económicas, por lo que las perspectivas para una recuperación inmediata son limitadas”, dijo Daniel Arias, analista económico de Monex.
En un comparativo de los componentes del indicador contra mayo de 2019, se observó un descenso general más marcado; el más amplio correspondió a la posibilidad de compra de bienes duraderos, cuya percepción de los consumidores bajó en 15.9 puntos.
Le siguieron la percepción de la situación económica actual de los miembros del hogar y la opinión sobre la condición económica del país comparada con la de hace un año, que retrocedieron 14.1 y 12.7 puntos, respectivamente.
Los indicadores complementarios sobre la confianza del consumidor, los cuales se refieren a las posibilidades de comprar bienes no duraderos, salir de vacaciones y ahorrar, entre otros, indican en general una percepción poco positiva de los consumidores, mostrando aún una ligera disminución de abril a mayo en cinco de los 10 conceptos que se miden.
El componente con el mayor descenso correspondió a la percepción sobre posibilidades económicas para salir de vacaciones de los miembros del hogar durante los próximos 12 meses, con un descenso de 2.5 puntos respecto al dato del mes anterior; le siguieron la percepción de la situación del empleo en el país en los próximos 12 meses, que bajó 1.8 puntos, y el indicador sobre las posibilidades de compras actuales de ropa, zapatos y alimentos, comparadas con las de hace un año, con una caída de 1.4 puntos.
El indicador que tuvo un incremento mensual fue el que mide la situación económica personal dentro de 12 meses comparada con la actual, el cual reportó un incremento de tres puntos.
La percepción sobre las posibilidades actuales de ahorrar avanzó 1.6 unidades.