México puede estar en la mira del presidente electo estadounidense, Joe Biden, por decisiones del gobierno que afectan a inversionistas, o porque son contrarias a los compromisos del T-MEC, dijo el exjefe negociador del acuerdo, Kenneth Smith Ramos.
El exfuncionario de la Secretaría de Economía expuso que la administración del presidente estadounidense Donald Trump no tomó posturas firmes ni abrió, al momento, controversias contra México, pero la siguiente administración podría hacerlo.
“¿Qué puede pasar en los próximos meses? (…) Que Estados Unidos haga algo que no hizo la administración Trump entre el 1 de julio y las elecciones, que es tomar posturas firmes y empezar a abrir casos de solución de disputas en contra de México”, dijo.
Comentó que hay diversos temas, “ya sean los laborales, que pueden o no ser frívolos, pero amenazaban con hacerlo [iniciar controversias] y hay presión de sindicatos estadounidenses”.
Smith Ramos agregó que en materia agropecuaria, algunas decisiones arbitrarias que ha tomado la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por ejemplo prohibir insumos de la biotecnología agrícola, “pueden meter presión a México”.
En el mismo panel organizado por Forbes, el exrepresentante del equipo negociador del tratado del sector privado, Moisés Kalach, dijo que México debe concentrarse en cómo aprovechar la relación económica y comercial con Estados Unidos.