Más Información
No hay prórroga para el INE en elección judicial; no hay margen para su desobediencia, responde Noroña
GN y Ejército mantienen operativos en Michoacán contra extorsión a limoneros; buscan frenar operaciones de Los Viagras y CJNG
Claudia Sheinbaum se reúne con De La Fuente, Ebrard y Garduño, tras envío de carta a Trump; acudieron a Palacio Nacional
A pesar de que para los inversionistas se mantiene el apetito por la economía mexicana, hay factores que deben mejorar, como revertir el deterioro de la seguridad, lo que puede frenar la llegada de nuevos proyectos, afirmó el nuevo presidente del Consejo de Empresas Globales (CEG), Manuel Bravo.
La inseguridad “es un foco rojo para las inversiones”, porque afecta operaciones y encarece la operación en general, de productores y proveedores, dijo en entrevista con EL UNIVERSAL.
“Hay temas muy preocupantes relacionados con el robo de nuestros productos, con relación a la extorsión y el cobro de derecho de piso. El diagnóstico es muy complejo y las soluciones no son únicas”, añadió el también presidente y director general de Bayer México.
Esta situación de inseguridad, añadió, “le pone un obstáculo a las inversiones, sin duda. Hablamos mucho de que necesitamos una política de Estado de largo plazo para avanzar hacia la construcción de un México más seguro”.
Para atraer inversiones a México a través de la relocalización (nearshoring), “tenemos una ventana muy definida. Estamos hablando muy probablemente del próximo sexenio, no sé si sean cuatro o cinco años, porque hay otros países jugadores. Contamos con tiempo para resolver algunos obstáculos que ya tenemos como cuello de botella”.
Por eso preocupa que la seguridad “se ha venido deteriorando”, mencionó el directivo.
“Nos ha hecho menos competitivos y en nuestras conversaciones a nuestras casas matrices es un foco rojo para atraer inversiones”.
Bravo explicó que hay cinco grandes ejes sobre los que tiene que trabajarse en el país, que son la formación de talento, invertir en infraestructura para que haya conectividad física y tecnológica, avanzar en la transición hacia energías limpias.
También fortalecer el Estado de derecho, la certeza jurídica y que haya contrapesos, además de atender el tema de la inseguridad.
Para Bravo, quien tomó posesión como presidente del Consejo de Empresas Globales el viernes pasado, “hay apetito por México y estamos al máximo de capacidad de recibir esas inversiones si somos capaces de abrir más la tubería. Seguramente vendrán más inversiones y aquí el apetito externo está de nuestro lado de ser capaces de abrir esa tubería”.
Detalló que, por la falta de agua, hace unos meses pararon algunas plantas industriales, de manera que se podría atraer más empresas si se contara con más infraestructura, así como la capacidad de tener suficiente electricidad y gas.
“Específicamente en el norte del país, si tuviéramos capacidad de sobra, hubiéramos tenido 30% más de compañías interesadas en empezar a hacer análisis o inversiones en el país”, recalcó Bravo.
Destacó que de los 170 mil millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED) que se han recibido en el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, cerca de 45% fue aportado por las empresas que conforman el CEG.
El Consejo de Empresas Globales está integrado por 60 compañías que representan 10% del Producto Interno Bruto (PIB), así como alrededor de 11% de las exportaciones del país.