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La cancelación del partido de la NFL entre Kansas City Chiefs y Los Angeles Rams dañará la imagen de México, además de las pérdidas económicas que se generan, porque el evento genera un impacto diario de 45 millones de dólares, más un valor mediático de 250 millones, dijo el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco) de la CDMX, Nathan Poplawsky.
“Lamentamos profundamente la cancelación del evento, porque es algo por lo que se luchó mucho, lo más grave y algo que no se puede medir es el daño a la imagen que los dueños del Estadio Azteca ocasionan a la ciudad, por su falta de compromiso”, explicó durante la presentación del programa en línea Prepa Hoy, el cual busca que los trabajadores del sector mayores de 18 años terminen la educación media superior.
El líder de la Canaco dijo que E&Y calculó que en el partido de la NFL de 2016 llegaron 9 mil 500 visitantes internacionales y 21 mil 500 nacionales, quienes hicieron un gasto en el país, considerando los vuelos de avión, de 43 millones de dólares, a lo que se le suman ingresos por otros conceptos.
Los datos que reportó E&Y en 2017 muestran que la capital tuvo ingresos por los gastos de los visitantes de 32 millones de dólares, más 2 millones en el país y 839 millones en vuelos.
Además de que se calcula que un día de partido genera un impacto económico de 44.8 millones, se crean 2 mil 840 empleos y 3.3 millones de impuestos.
Todo lo cual se perderá por la cancelación del partido porque implicaba noches de hotel, gasto en alimentos, desplazamiento y boletos de avión.
Poplawsky dijo que el deterioro de la cancha en el Estadio Azteca era tan lamentable que se tomó la decisión de suspender el partido, a pesar de que se tuvo mucho tiempo para cuidar la cancha.
El 13 de noviembre se anunció que por el mal estado de la cancha del Estadio Azteca se cancelaba el juego de la NFL programado para el 19 de noviembre.
La Profeco anunció que se reembolsarán los precios de los boletos, pero no los cargos por servicio, entrega o emisión de los mismos, porque así se estableció en los términos que los proveedores fijaron con Ticketmaster, así como con las empresas intermediarias en la venta de boletos como Mexticket y StubHub.