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Para apoyar al gobierno en la implementación de la reforma laboral, Canadá aportará el equivalente a 445 millones de pesos durante cuatro años.

El embajador de Canadá en el país, Graeme C. Clark, explicó que el gobierno que representa confía en que los cambios que realiza México permitirán entrar en una nueva era de justicia laboral.

“Canadá dedicará 27 millones de dólares canadienses durante cuatro años para promover la reforma laboral de México, así como la implementación de las disposiciones laborales del T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá)”, añadió.

Clark afirmó en el Tercer Foro Laboral organizado por el Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (Index) que Canadá cree que estos proyectos pueden eliminar barreras y facilitar el surgimiento de nuevas prácticas basadas en las nuevas leyes laborales.

La reforma permitirá una justicia laboral independiente e imparcial, una auténtica representación sindical de los trabajadores y libertad sindical.

De los 445 millones de pesos ofrecidos, casi 330 millones se destinarán a proyectos de desarrollo y asistencia técnica, mientras que a nivel de entidades se apoyará a trabajadores en la formalización de sindicatos democráticos que protejan sus derechos laborales.

Mecanismo de diálogo

Para evitar llegar a paneles de controversia y atender inquietudes, dudas y problemas en materia de inversiones, los gobiernos de México y Canadá establecerán una mesa de trabajo o mecanismos de diálogo.

El embajador de México en Canadá, José Gómez Camacho, explicó que el grupo se conformará con cancilleres y secretarios de comercio de cada país.

“Esta por establecerse un mecanismos o una especie de mesa de trabajo, ideada por el canciller mexicano, en donde periódicamente se van a sentar a la mesa él y la secretaria de Economía, con el canciller y el ministro de Comercio de Canadá, para conversar asuntos concretos”, dijo.

Durante el foro organizado por Index, el diplomático comentó que es mejor tener un diálogo bien pensado sobre la relación comercial entre las partes, porque ello da más oportunidades de afianzar las inversiones y el comercio.

Afirmó que las inquietudes, dudas y problemas entre inversionistas pueden producir alguna disputa comercial en el marco del T-MEC.

“Esto en mi opinión, no tengo duda de que va a funcionar muy bien, y no tengo duda de que se va a convertir en un mecanismo previo que va a evitar problemas que, de otro modo, pueden ser bien resueltos, y que terminen en solución de controversias”, afirmó.

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