El desarrollo del muelle de cruceros en Cozumel, Quintana Roo, es una de las 39 obras inscritas dentro de los Proyectos de Reactivación Económica acordados por el presidente Andrés Manuel López Obrador y el sector privado en octubre de 2020; sin embargo, está enfrentado oposición con amparos de grupos ambientalistas.
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), que promovió amparos contra el Tren Maya y la Refinería olmeca, llevó a cabo uno más ahora para detener la construcción del nuevo muelle, que representa una inversión de 511 millones de pesos, el cual está siendo revisado por el Juzgado Tercero de Distrito con sede en Cancún, que encabeza Pamela López.
El colectivo ciudadano Isla Cozumel, con el acompañamiento jurídico del Centro contra la Discriminación, también interpuso otro amparo ante el Poder Judicial federal, a fin de suspender la obra, señalando como autoridades responsables al presidente López Obrador y a las secretarías de Comunicaciones y Transportes, Medio Ambiente y Recursos Naturales, y Hacienda y Crédito Público, debido a que no fue respetado el “derecho a la ciudad” de las personas cozumeleñas y por poner en riesgo el ecosistema de la isla.
El pasado 5 de enero fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el “Título de concesión otorgado a favor de la empresa Muelles del Caribe S.A. de C.V., para usar y aprovechar bienes de dominio público de la Federación, consistentes en una zona federal marítima para la construcción, operación, aprovechamiento y explotación de una Terminal Marítimo-Portuaria de cruceros, de uso particular, propiedad nacional, ubicada en la isla de Cozumel, fuera de los límites del recinto portuario, en Quintana Roo”.
De acuerdo con fuentes de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, la construcción del nuevo muelle de cruceros en Cozumel cuenta, desde finales de 2021, con todas las autorizaciones de la Semarnat y Semar.
Alertaron que en caso de que la obra sea suspendida, las dos terminales que actualmente operan en la zona, una de la naviera Carnival y otra de SSA México, concentrarían el mercado de arribos de cruceros a la isla.
Antes de la pandemia de Covid-19, estas empresas facturaban en dólares por el uso de sus muelles por parte de más de mil 700 barcos cada año.
Al cierre de esta edición, la empresa Muelles del Caribe no fue notificada del amparo y aunque la autoridad lo admitió, se estableció este 28 de febrero para una audiencia constitucional.
El conflicto por la construcción del muelle de Cozumel escala en momentos en que las tendencias turísticas y del mercado de cruceros arrojan que esta industria empieza una reactivación mundial, señaló la Comisión de Turismo de Cruceros de la Concanaco.
La presentación de los Proyectos de Reactivación Económica mostró que el objetivo es ampliar la capacidad de Cozumel y permitir el arribo de las navieras que no encuentran posiciones y ventanas disponibles en las terminales actuales.