El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) estimó que las ventas durante El Buen Fin de 2019 no fueron mayores a los 118 mil millones de pesos que se calcularon, debido a que hubo algunas limitantes.
Entre los factores que enlistó el organismo están las promociones hechas a inicios de noviembre, que algunas cadenas de autoservicio adelantaron un día o dos los descuentos de ese programa, que el gobierno no adelantó la totalidad del aguinaldo y el bajo nivel salarial.
En el Análisis Económico Ejecutivo semanal, el CEESP informó que también afectó el estancamiento de la economía en los tres primeros trimestres del año, por la debilidad de la demanda agregada y caída del consumo.
Aunque las ventas de El Buen Fin a lo largo de toda su historia crecieron 196%, éstas pueden ser mayores si no se repitieran las limitantes que impactaron en las ventas. Como por ejemplo el que “varios negocios y empresas arrancaron el periodo de ofertas y descuentos antes del inicio formal del Buen Fin”.
En segundo lugar, “muchos” establecimientos lanzaron promociones desde principios de noviembre “que también pudieron haber tenido un efecto reductor en las ventas del periodo de El Buen Fin”.
Otra situación que consideraron que afectaron las ventas fue que el gobierno federal solamente adelantó 50% del aguinaldo, el cual lo otorgó el 13 de noviembre, cuando en 2018 se entregó la totalidad de la prestación, es decir, prácticamente los burócratas solo recibieron “la mitad de los recursos que se liberaron el año pasado por este concepto”.
El bajo nivel salarial fue otro de los aspectos a considerarse, porque las nuevas contrataciones se “concentran en niveles salariales bajos, lo que quizá redujo la capacidad de compra de los hogares. De ser así, el valor promedio del ticket de compra en los días de ofertas posiblemente disminuyó, aun cuando el número de operaciones haya crecido”.